Estar interna en la clínica se ha convertido en
una rutina de vida, a veces por control u otras por complicaciones. Ha pasado
un mes desde que nos casamos Héctor y yo y aunque los primeros meses de casados
deberían ser una luna de miel a cabalidad, lo nuestro ha sido un completo
desastre. Cancelamos nuestra luna de miel, la razón mi maldito estado de salud;
he bajado cinco puñeteros kilos y cada día parezco más un cadáver ambulante,
para variar Héctor no ha vuelto a
hacerme el amor. Estoy cansada hasta el hastío de que me todos me traten como
una convaleciente, es cierto me voy a morir pero no necesito de su lastima;
necesito que me hagan sentir viva...estoy cansándome de luchar y me pregunto
una y otra vez por qué Héctor decidió casarse conmigo, no era suficiente razón
el saber que al igual que todo lo que una vez importo para él yo también
moriría. He sido egoísta y hasta ahora he conocido el alcance de mi mezquindad,
Héctor no se merece esto y yo no tengo porque obligarlo a vivir esta vida de
mierda que le ofrezco. Cada vez que veo a sus ojos, solo veo dolor y
desolación...aunque ya no sé si lo que veo es culpa y remordimiento. No ha
vuelto a la editorial, todo lo concerniente al periódico lo lleva a cabo la
junto directiva aunque de vez en cuando un delegado de la misma se viene a
reunir con Héctor en su despacho.
-Señor, lo necesitan –me reincorporo, Héctor no
está aquí conmigo, está en el despacho
-quien lo solicita Ibby, mi esposo está en el
despacho –ella asiente y entiendo que debe ser el delegado de la editorial,
precisamente estaba en el despacho preparando unos asuntos que debía tratar con
él sobre unos movimientos importante
Maldita sea nuevamente estoy sangrando por la
nariz...he aprendido que cualquier hemorragia por muy leve que sea debo de
decírselo a Héctor porque si no me podría arrepentir, debo verme con Trace en
la tarde pero a juzgar por el tiempo ya Héctor debió haber terminado su reunión
de negocio y mejor decirle que me lleve para evitar algo peor.
Me dirijo al despacho y escucho risas, es tan
extraño escuchar a Héctor reír en estos días que me causa curiosidad saber el
motivo de su aparente emoción, abro el despacho y veo que es una mujer quien
está con él, lleva un ajustado vestido rojo que deja entrever una figura perfectamente
entallada, un cabello muy bien cuidado que pende a uno de sus costados, tiene
los labios pintados de un rojo provocador y seria completamente estúpida sino
me diera cuenta que se le está insinuando a mi marido. Ambos voltean al sentir
mi presencia y que pueden ver sino más que una mujer que da lástima, con un
kleenex en la nariz tratando de parar insignificantemente una leve hemorragia
nasal...
-cariño sucede algo –Héctor suelta la copa que
sostiene y viene corriendo hacia mí, no sé si lo que veo en sus ojos es lastima
o verdadero dolor...mierda por qué me tengo que sentir tan insegura con
respecto a Héctor o sus sentimientos
-no pasa nada Héctor –un momento lo he llamado
así –puedes seguir con tus asuntos, solo quería recordarte que tengo cita con
Trace esta tarde –los ojos me arden por las lágrimas que estoy conteniendo,
quién es esa mujer y por qué Héctor estaba tan feliz a su lado
-permíteme el kleenex, has estado sangrando
–aparto mis ojos de Héctor y veo como la guarrilla esa está atenta a nuestra
conversación
-no pasa nada, hablamos después –salgo del
despacho evadiendo la reacción de Héctor por mi reticencia a responderle y
deseo que venga detrás de mí y deje a la loba aquella sola en el despacho demostrándole que soy más importante
para él...pero no, no viene tras mí y sintió como si algo dentro de mí se
partiera en mil pedazos...
Ella es lo que él
necesita...
-Catalina estas bien –me ha llamado Catalina,
Dios no puedo mirarlo...
-estoy bien Héctor, estoy bien –el aire me está
faltando, por favor Dios que no tenga otra crisis, no quiero a Héctor encima de
mí por pura lastima
Camino hasta el sofá que adorna el balcón de
nuestra habitación y me dejo caer sin fuerzas, él enseguida viene tras mí como
no lo hizo hace un rato cuando fui hasta su despacho
-mi amor que te pasa –ahora si soy su amor
-nada que no sepa usted señor Mafort –envuelvo
mis brazos alrededor de mis piernas evitando el temblor que recorre mi cuerpo
-maldición Catalina como puedes decirme que no
pasa nada si desde que entraste en el despacho has actuado diferente conmigo,
ahora hasta me llamas por el apellido de mi padre –sus voz está por encima de
lo normal y en vez de sobresaltarme me llenan de rabia
-quien era esa mujer –maldición me repetí un
centenar de veces que no se lo preguntaría, si él no había tenido la delicadeza
de contármelo antes por qué tendría que ser yo la que se lo preguntara
-Vanessa?? –Su voz ahora suena en sorpresa
–ella es la delegada de la junta con la que he trabajado desde que traslade el
trabajo a la casa –un momento ahora no era “el” sino “la” delegada de la
junta...
-cuando pensabas decirme de que no es ningún
“delegado” sino “delegada” la que se reúne contigo durante horas para tratar lo
de la editorial –no había vuelta atrás me sentía traicionada y tenía que
hacérselo saber
-espera...de eso va todo, estas así conmigo
porque no te dije que me reunía con una mujer en vez de un hombre –se acerca
para abrazarme pero me levanto de un tiro del sofá evitando el mareo que sentí
al hacerlo –Catalina estas acaso celosa de Vanessa –lo miro y espero que sienta
el odio de mi mirada
-valla ahora no es el delegado sino Vanessa,
sabes que Héctor he estado pensando en las mil maneras que me pudieron impulsar
para ser lo suficientemente mezquina para pedirte que siguieras a mi lado pero
no puedo evitar ser razonable de que mereces tener a tu lado más que una
paciente terminal de LMA –Héctor se levanta y se lleva las manos a la cabeza y
veo algo confuso en su expresión
-de que va esto Catalina...habla claro porque
los rodeos no van conmigo –el temblor vuelve a mí y los ojos se me humedecen
-que entiendo perfectamente porque no habías
querido contarme acerca de tus reuniones con ella, es una mujer bella –cada
palabra me quemaba –llena de salud y que al parecer te hace sonreír lo que yo
no puedo hacer desde que descubrimos que estoy a punto de morir –Héctor me mira
sorprendido
-oh Dios mío...Catalina no sigas por ese camino
–se acerca a mí pero me alejo nuevamente
-Héctor no finjamos, el amor es una mierda que
apesta...tú no puedes seguir queriendo estar a mi lado cuando ni como mujer te
puedo complacer –
-Catalina cállate, tú no sabes lo que estás
diciendo...tú no tienes ningún derecho decidir lo que haga o deje de hacer con
mis sentimientos –
-Héctor perdóname por haberte pedido que
siguiéramos con nuestros planes de boda...no necesito que sigas a mi lado por
lastima –el dolor que siento es insoportable pero antes que pueda decir algo
más Héctor estampa sus labios en mí, sus labios son fuertes y decididos, mi cuerpo
se estremece con su tacto...oh Dios...
-Catalina...te amo, acaso no te basta con
eso...como puedes pensar siquiera que yo podría vivir alejado de ti, Vanessa no
es más que una mujer como muchas pero tu mi amor eres la única. Dime que te ha
hecho sentir insegura de mi amor por ti, dímelo y lo reparare...solo no vuelvas
a decir algo tan horrible como eso, por favor no lo hagas porque lo único que
me puede matar no es tu enfermedad sino que me dejes de amar o que creas que no
te amo...jamás dudes de mi amor porque sería miserable al saber que no te amo
lo suficiente para que estés convencida de eso –no sé qué decirle, maldición el
hombre más hermoso sobre la faz de la tierra sigue a mi lado cuando no soy más
que un saco de huesos y yo qué hago sino sentirme insegura de sus sentimientos
solo porque una zorra como esa trabaja con él
-mi amor dime algo... –Héctor me lleva a su
regazo y me abraza, me siento estúpida por todo lo que le he dicho, lo único
que se hacer es llorar como una tonta
-Héctor soy una estúpida, una tonta...perdóname
–
-no mi amor tú no eres nada de eso, tú eres la
mujer más inteligente, audaz, bella, testaruda, persistente que conozco en esta
vida –me besa nuevamente y me lleva hasta nuestra cama –mi amor no puedo estar
un minuto más lejos de ti, quiero tenerte –me mira como si estuviera pidiendo
mi aprobación, pero de por Dios si lo único que quiero es que me haga el amor
-mi amor pero si lo único que he deseado todos
estos días desde nuestra boda es que me hagas tuya –no lo merezco de esto estoy
segura
Me besa con pasión, me ama...
-Catalina Mellan te amo –desliza por encima de
mi cabeza la blusa –no hay nadie más que
tú en mi vida –besa cada centímetro de mi piel –esa mujer no significa nada para mí –se deshace
de mi pantalón de chándal –lo único que me mantiene con vida es tu amor y sin
el nada quiero –
-Héctor... –me silencia con un beso
-shh...no hables mi amor, soy yo quien no debe
dejar de decirte que te amo –
-aaahhh –
-eres hermosa y eres mía –entra en mí una y
otra vez –solo mía y yo soy tuyo –mi cuerpo lo ansiaba tanto, sin él era
sentirme vacía –me crees mi amor...me crees –lo miro a los ojos y sus ojos
están llenos de lagrima, el corazón se me desgarra –te amo... –
Descansa sobre mi pecho, no importa cuán pesado
lo sienta quiero tenerlo así para siempre junto a mí, paso mis dedos por sus
cabellos, lo abrazo y siento como se relaja. Se sostiene sobre sus codos y me
mira
-no te dije nada sobre ella porque no tiene
importancia, es una empleada más...me crees verdad, tu sabes que no hay nadie
más para mí, solo eres tu pequeña, solo tu –
-solo actué como una estúpida, perdóname...es
que hacia tanto que no me hacías el amor y verte feliz junto a ella me tomo con
la guardia baja...Héctor me voy a morir y cuando lo haga tu tendrás que seguir
con tu vida...prométeme que lo harás –
-Catalina solo estaba riendo por un comentario
que hizo sobre la firma, solo me mostraba cortes...solo tú me haces feliz, solo
tú me puedes hacer sonreír de verdad –vuelve y me besa y ya no quiero seguir
con esa tontería, le amo y él me ama siempre he sabido eso y no tengo porque
dudar ahora
El control con Trace fue satisfactorio, me dijo
que no tenía nada de qué preocuparme, solo debo cuidarme porque tengo las
defensas bajas y puedo pescar cualquier refriado. Cuando llegamos a casa,
Héctor no hace más que consentirme y pedirme perdón una y otra vez
-mi amor voy a reubica a Vanessa, ella no
volverá a la casa y nombrare a otra persona para que me informe de los avances
de la editorial –
-no tienes por qué hacer eso –
-ella perturba tu paz y yo no puedo hacer que
eso vuelva a suceder y no se hable más del tema –
Aurora ha venido a visitarme y Héctor me deja a
solas con ella...por fin
-estoy embarazada –miro a Aurora como si le
hubiesen salido dos cabezas –no me vas a decir nada –sacudo mi cabeza para ver
si escuche bien
-pero si apenas...te casaste porque estabas
embarazada!!! –Aurora se sonroja
-sí ósea no, nos casamos porque era lo que
deseábamos y con lo del bebe no quisimos esperar más –
-y porque hasta ahora me lo dices –
-porque con el primer trimestre del embarazo es
mejor mantener la cautela, no quería darte una noticia como esta y si luego
sucedía algo doloroso no quería que pasaras por algo como eso –la abrazo como
si no fuera a bastar y le beso las mejillas
-oh amiga... –las lágrimas me salen a raudales
-cállate no digas nada pulgosa –nos abrazamos y
reímos como tonta
Quería
contarle acerca de esa tal Vanessa a Aurora pero con la noticia del bebe decidí
disfrutar de la noticia...cuando quede a solas en la habitación me derrumbe,
estaba feliz por Aurora y Cesar pero era verla era un recordativo de que yo
jamás podría disfrutar la fortuna de tener un hijo en mi regazo...jamás podría
tener un hogar de verdad junto al hombre que amaba
-estas bien amor –Héctor llego hasta donde
estaba y se acurruco junto a mi
-si...no pasa nada, solo me sentía un poco
cansada –lo miro y sé que no me cree lo que le estoy diciendo pero decirle la
verdad sería crear más tensión entre los dos...
HÉCTOR
Lleve a Catalina hasta la cama y la acune en mi
regazo hasta que se quedó dormida. Me he
sentido tan culpable desde que ella entro en el despacho, ella tenía todo el
derecho de sentirse así y no la culpo porque para nadie puede pasar por
desapercibido el hecho de que Vanessa todo el tiempo se me esta insinuando...sé
que estoy jugando con fuego, pero maldición ella es una mujer verdaderamente
excepcional y cuando me reúno con ella es como un bálsamo...me comprende y no
trata de adentrar en mi agonía por la enfermedad de Catalina. Amo a mi esposa y
sé que aunque solo deseaba salir de la rutina teniendo una conversación libre
de temores o dolor con Vanessa eso no era una actitud digna de admirar, por eso
he decidido reubicarla porque no quiero que Catalina se sienta amenazada o
herida y más si sé que es por mi culpa.
Todo este tiempo de la abstinencia ha sido una
fatal idea, solo ha servido para acrecentar sus temores y para que perdiera el
control cuando le hice el amor...es que esta tan vulnerable que tengo tanto
miedo de hacerle daño, le amo...le amo con locura y saber que la voy a perder
me desgarra el alma.
CATALINA
-ey, que haces ahí mirándome como si me
estuvieras adorando –Héctor entorna los ojos y acaricia mi rostro
-buenos días princesa –me da un tierno beso en
la frente...luego en la nariz y me besa en los labios con tanta calidez que el
corazón se me acelera
-perfecto día mi amor –sonríe contra mis labios
y me invita a que lo siga hasta la ducha
La barriga se le nota asombrosamente a Aurora,
con los días he empezado a olvidar la noción del tiempo y según ella ya él bebe
está pasando por los cinco meses, por Dios cinco meses y yo todavía sigo con
vida.
-mi amor –Héctor me llama y dejo de hablar con
Aurora
-estamos aquí bebe –Aurora pone en blanco los
ojos
-vamos tarde a tu chequeo...Aurora ven y te
dejamos de paso en tu casa –nos levantamos y lo seguimos
En el consultorio con Trace todo se vuelve
rutinario, exámenes...chequeos...sugerencias...
-si –Héctor recibe una llamada –en estos
momentos estoy con mi esposa –está bien, estaré en unos minutos -
-quien era –
-de la editorial, necesitan una firma para un
aval...te importa si llegamos un momento -
-no, claro que no –a veces Héctor exagera con
su atención en mi
Héctor entra al salón de juntas y yo lo espero
en su despacho, él quería que lo acompañara pero no quería distraerlo...sé cómo
es él cuando me tiene cerca. Estoy sentada en su silla con vista a la ciudad,
cuando siento que alguien entra en la oficina giro la silla en dirección a la
puerta.
-valla le queda muy bien estar sentada en esa
silla –respiro profundamente...por qué siento que debo odiar a esta mujer
-algo que sin duda no te quedaría a ti –su
expresión se tensa y creo que tengo un punto a mi favor
-me lleve una impresión equivocada de ti, es
más Héctor se refirió de una manera muy diferente a ti -
-y que impresión te he dado –le ofrezco una
sonrisa desafiante
-de mujer arrogante y que sin dudarlo no merece
a un hombre como Héctor –duda en decir algo pero no le doy oportunidad
-sabes jugar una posición muy estratégica, a mí
no me engañas pero a quien ves aquí es una mujer que no se anda con rodeos y
apenas puedo soportar tu presencia...no me gusta aquellos que se meten con lo
que es mío –se cruza de brazos y sé que está a punto de mostrarme tal cual es
-puedo jugar como quiera, no olvides que tu
vida tiene un tiquete seguro de expiración y al final solo quedare yo –sus
palabras me producen aberración
-pero mientras esperas seguiré disfrutando de
cada momento, caricia y amor que me brinde mi ESPOSO –su labio inferior tiembla es evidente
que muere por Héctor –y te advierto lo que siente Héctor por mí ni la muerte ni
el tiempo lo pueden apagar, una mujer tan bella como tú no debería perder su
tiempo con alguien que ya tiene sus días contados –
-te ves muy segura de ti misma pero a pesar de
que Héctor me reubico hace meses sé que tengo ganado un sitio en su corazón y no
sabes cómo me gane su confianza –confianza...confianza en mi esposo es lo que
debo sentir
-confianza no es amor...la confianza no ha sido
suficiente para llevarte a la cama –sus ojos despiden furia –esa confianza la
puedes emplear para masturbarte en su nombre –
-quien ríe de ultimo ríe mejor...recuerda que
yo seguiré con vida –esta frustrada y por mucho que sean ciertas sus palabras,
ella no tiene nada...yo tengo a Héctor
-Vanessa hágame el favor y abandone mi oficina,
no puedo permitir que nadie le falte el respeto a mi esposa...eres una gran
manipuladora pero no lo suficiente como para que te anteponga por encima de mi
esposa –Vanessa palidece, confieso que no sabía que Héctor nos escuchaba
-Héctor te puedo explicar lo que ha ocurrido
–Héctor camina hacia mí y se coloca detrás de la silla
-no hay nada que explicar, estoy utilizando
todo mi autocontrol Vanessa...no hay cosa que yo desprecie más que una traición
y todo el tiempo que creí en tu sincera amistad no fue más que una estratagema
para aprovecharte de mis momentos de debilidad. Por favor abandona mi oficina -
Cuando Héctor actúa de esa forma me daba mucho
miedo...es tan frívolo. Vanessa abandona la oficina y no exagero al decir que
sus ojos estaban llenos de lágrimas, realmente no la culpo...Héctor es un
hombre maravilloso y a punto de enviudar.
Héctor gira la silla hacia él y no me gusta lo
que veo. Se arrodilla frente a mí y descansa su cabeza en mi pecho, abro las
piernas para que este más cómodo
-perdóname –su voz es entrecortada
-te acostaste con ella –él levanta su rostro
-crees que lo haría –Dios ya no se ni que
pensar
-entonces por qué desde esa vez que entre en el
despacho no haces más que pedirme perdón una y otra vez –vuelve y entierra su
rostro en mi regazo y un temor empieza a crecer en mí, agarro con fuerza sus
cabellos y empiezo a rezar para que no sea lo que me estoy imaginando
-no lo hice y nunca lo haría...Catalina no
puedo soportar que sufras y menos si es por mi culpa. Me siento culpable porque
no quiero imaginar que por el hecho de buscar un poco de paz para mí, lo único
que logre fue hacer crecer en ti la duda y con ello tu dolor –sus palabras me
aguijonan
-un poco de paz Héctor –lo alejo bruscamente de
mí y salgo a toda velocidad de la oficina
Me dirijo hasta la oficina de Greg...no estoy
pensando con claridad y lo último que quiero es seguir hablando con Héctor
-estas ocupado –entro a su oficina antes que
Héctor se dé cuenta a donde he ido
-para ti nunca lo estoy mi lirón salvaje
–mierda esto no va a ser como lo planee
-Greg... –él se levanta y viene hasta mí y me
conduce hasta el sofá que esta junto a su escritorio
-está bien Catalina –me mira y yo le sonrió
nerviosamente –mejor –asiento y el besa mi mano
-podemos salir de aquí –Greg me mira confundido
-sucede algo, donde esta Héctor –se levanta –te
ha hecho algo –definitivamente fue un error venir
-olvídalo, mejor tomo un taxi hasta la casa
–ahueca en entre sus manos mi cara y me mira a los ojos
-algo te pasa mi...Catalina y te llevare a
donde quieras si me cuentas que está pasando, sabes que no puedes estar sola
por ahí –los ojos se me llenan de lágrimas de solo pensar en lo que me dijo
Héctor un hueco en el pecho parece querer asfixiarme –está bien salgamos de
aquí –
Greg conduce fuera de la ciudad y ya sé a dónde
conduce y cada minuto que pasa es un error más sumado a la situación
-Greg si alguien nos ve aquí podríamos estar en
problemas...piensa en lo que diría Adela, incluso Héctor –Greg detiene el auto
en la represa
-nunca nadie nos ha visto aquí y aunque
sucediera solo hemos venido a hablar –salimos del auto y nos sentamos en un
tronco viejo junto al camino
-siento que toda esta situación es demasiado
para Héctor, tu más que nadie sabes lo mucho que él ha perdido en la vida y
tengo miedo que después de mi... –Greg me abraza
-no te vas a morir Cata, mira que todo este
tiempo has respondido al tratamiento y pronto aparecerá un donante de medula
compatible contigo –
-Greg no existe la posibilidad de que pueda ser
benefactora de un donante de medula, mi final es inminente y Héctor se está
consumiendo en el proceso –escondo mi rostro en su pecho y el dolor es
insoportable
-Catalina lo estás subestimando, él ha sufrido
demasiado pero no es tonto para no aprovechar cada segundo junto a ti...deja de
pensar en el futuro y dedícate a vivir el presente. Que ha pasado para que
pienses de esa manera –
-Vanessa –los músculos de los brazos de Greg se
tensan –quien es ella y no me mientas Greg –levanto la mirada para poderlo
encarar
-eso no te lo puedo explicar Catalina...eso no
me corresponde –me separo de él y esto no lo puedo soportar
-llévame a casa...estoy cansada de que me
traten como si no pudiera afrontar nada en mi vida -
-Cata... –me levanto y camino hasta el auto
Durante el camino no hablamos...esa mujer es
alguien más y no puedo evitar sentir crecer un sentimiento de agonía. Cuando
llegamos a casa Héctor está sentado en el jardín delantero, apenas me ve se
levanta y camina hasta el auto
-por Dios Catalina donde estabas –sus ojos
ahora se posan en Greg –ya has cumplido tu parte déjame con mi mujer –no puedo
ignorar el tono despectivo con que se dirige a Greg, hubiese protestado por la
forma en que lo ha tratado pero estos dos me tienen harta con sus secretos y
verdades a medias.
Salgo del auto y entro en la casa, Héctor habla
algo con Greg que no logro escuchar y me dirijo hasta la alcoba
-quiero que corras a esa mujer –le digo cuando
entra a la habitación
-no puedo hacerlo Catalina –la furia recorre
mis venas y juro que si no me cuenta ahora todo me voy a largar de su vida
-quien es ella Héctor Villianco, a Estefanía la
corriste por menos y a ella por qué no –estoy enfurecida y de verdad que no soy
capaz de prever lo que haría en este estado
-ella ya no es una amenaza para ti mi amor...ya
te he perdido perdón –ahora la desesperación atraviesa su rostro, Dios como
quisiera ir y abrazarlo y decirle que no pasa nada pero esa mujer no es
cualquiera
-dímelo Héctor, no quiero tus excusas...solo
quiero la verdad –tomo aire –Héctor sé que esto es mucho para ti y no me
extrañaría que buscaras consuelos en otros brazos pero no puedo soportar que me
engañes en mi cara –mi pulso se acelera
-de donde sacas que te engaño, acaso Gregory te
dijo eso. Te enfadas conmigo y lo primero que haces es ir a los brazos de ese
idiota que te recuerdo está casado con una mujer que es tu amiga –oh Dios es
posible que este escuchando esto
-retráctate de lo que has dicho. Retráctate
Héctor o te juro que te vas a arrepentir –el aire me está faltando en los
pulmones
-te he dicho lo pasa entre Vanessa y yo, viste
con tus propios ojos que te puse por encima de ella y cuando te desnudo mi
corazón y te digo lo que siento vas y te refugias en los brazos de tu amor
eterno y quieres que yo me retracte, de por Dios Catalina se justa, se justa
–Héctor tiene lo puños crispado, su expresión es una hoja en blanco y no sé
qué pueda estar pensando
-maldita sea Héctor –empiezo a respirar
aceleradamente –en realidad piensas que aun amo a Greg –mis ojos empiezan a
arder –es eso lo que piensas de la mujer con la que te casaste –me reclino
junto a la cama mi cabeza empieza a doler muy fuerte
-solo sé que siempre lo amaste y él no lo ha
dejado de hacer –como puede él pensar esto de mi
-quien es ella Héctor...dime de una maldita vez
quien es ella –la cabeza me empieza a dar vueltas
-Vanessa era hermana de Anna –oh Dios he
escuchado suficiente
-por eso no la puedes correr –un temblor se
apodera de mi cuerpo –no la puedes correr porque es la hermana de la mujer que
amabas o espera –me agarro el pecho el dolor es ensordecedor –o es que nunca la
has dejado de amar....no quieras justificar tus faltas conmigo, conmigo no
Héctor –trato de levantarme, quiero salir al balcón el aire me está faltando
-Catalina estamos enojado y así no pensamos con
claridad –lo miro como si con ello pudiese herirlo
-te voy a dar la paz que necesitas Héctor
Villianco, no seré una carga más para ti...no quiero tu lastima, menos tu
compasión –no me dirijo al balcón, camino hasta la puerta
-a dónde vas Catalina –me detiene y trato de
soltarme pero es imposible
-a donde nunca debí de haber salido A MI CASA –
-esta es tu casa –se muestra confundido
-no Héctor, esta es tu casa, no la mía...
–Héctor me lleva hacia él
-te estas escuchando –su voz empieza a temblar
-oh Héctor he escuchado demasiado...suéltame
que no puedo estar ni un minuto más junto a ti, no si aún dudas de mi amor, no
si no te puedes liberar del fantasma de Anna –me mira como si quisiese
descubrir una respuesta a alguna pregunta no pronunciada
-perdóname Catalina–empiezo a sentir como una
pequeña hemorragia asoma por mi nariz, lo miro y no puedo estar más así
-por qué me pides perdón Héctor, por nunca
haber creído en mi amor –él trata de limpiar la sangre que empieza salir y le
retiro la mano –mírame y date cuenta lo que soy...me pides perdón porque aún no
has podido olvidar a Anna...me pides perdón por qué –
-Catalina vamos a urgencias, estas empezando a
sangrar demasiado –
-me importa una mierda que me desangre, estoy
cansada de todo esto Héctor...cansada de ser una carga, cansada de ser la
culpable de haber hecho tu vida una mierda cuando ni siquiera el amor que nos
decíamos profesar era verdadero –Héctor empieza a ponerse nervioso a causa de
la sangre que me está saliendo
-Catalina déjame llevarte al médico...mi amor
puedes iniciar una crisis...por favor –me agarra por los hombros
-me quiero morir Héctor, no quiero seguir con
esto –me limpio la sangre con la manga de la blusa –y en estos momentos no
quiero seguir viéndote, odio tus reproches y celos injustificados hacia Greg
–debí de morderme la lengua porque sé que el odia que llame así a Greg
-si no vienes por las buenas conmigo, Dios me
ayude...y en algo tienes razón no quiero seguir hablando acerca de tu “Greg” –
No tengo otra opción, la sangre empieza salir
con más fuerza que siento que me ahoga. Héctor conduce a toda velocidad hacia
la clínica y por mucho que quisiera decirle algo, ambos estamos enojados y
diciendo cosas que no son ciertas o al menos por mí parte...
HÉCTOR
Maldición no sé cómo pude decirle esas cosas a
Catalina, en que estaba pensando de por Dios...pero es que verla llegar con
Gregory después de que estuve preocupado todo el tiempo que estuvo
desaparecida, el que no contestara mis llamadas...Dios la amo, ella no tiene por qué dudar de mi amor, a Anna
jamás la llegue a amar como la amo a ella. Maldita sea y esta lo de Vanessa,
ojala pudiera explicarle a Catalina y que ella me entendiera...ahora solo
espero que mientras la atiendan se pueda serenar. Había pasado tanto tiempo
desde la crisis que sufrió en nuestra boda...
-Héctor no sé qué abra alterado la presión de
Catalina, pero sabes que ella está en un estado de susceptibilidad de mucho cuidado...ha pedido que no te dejen
verla –Trace esta confundida con todo esto –arregla esto porque su estado
emocional la pueden afectar más de lo que te puedas imaginar –siento como si mi
corazón se detuviera
-voy a verla –inspiro fuerte
-solo no compliques la cosas –me deja solo y me
dirijo hasta la habitación de Catalina
-que haces aquí...le dije a Trace que no quería
verte –sigue enojada conmigo y ahora no sé qué hacer
-amor por favor...perdóname cielo, soy un
tonto, un estúpido. Pero de por Dios tu puedes actuar llena de celos y yo
simplemente aceptar lo que hagas y si digo algo me tratas como si fuera digno
de muerte –pone los ojos en blanco y mira hacia la pared
-claro te puedo pedir que corras a esa mujer y
es algo imposible pero tu si puedes venir a insinuar que te soy infiel con
Gregory –por lo menos no lo llamo “Greg” –puedes meterte tus celos por donde te
quepan –no puedo evitar reírme, ya saco la fiera que lleva dentro
-eso quiere decir que me perdonas –me mira otra
vez y creo que estoy actuando como un estúpido porque en vez de verla cambiar
de parecer sus ojos están ensombrecidos
-lárgate de mi habitación, le he pedido a Trace
que llame a Aurora...por ahora le voy a pedir que me deje quedar en su casa,
soy consciente que en mi estado no me puedo quedar sola en casa de mis padres y
deja de bromear conmigo que no estoy de genio para tus estúpidas bromas...lo
mejor fue que contrataras a tu querida amiga, ella solo ha sido el medio para
que nos diéramos cuenta que lo nuestro siempre fue un error desde un inicio –se
limpia una lagrima que corre por su pálida mejilla y siento como si me
arrancaran algo desde muy adentro
-Dios, mi amor...vamos a calmarnos, estas
enojada conmigo con justa razón y no me voy a justificar. Quieres que corra a
Vanessa y lo voy a hacer, si quieres puede seguir llamando como quieras al
estúpido de Gregory, Trace no ha dicho que te daría de alta así que puedes
pensar toda la noche y mañana cuando no estés enojada conmigo veras que hemos
sido unos obcecados...mi amor por favor –Dios que entre en razón porque si no
se me va a venir la vida de golpe
-si eso quieres, hazlo Héctor...si quieres que
me quede interna esta noche lo hare pero mañana quiero irme a vivir con Aurora
y por favor quiero que te pongas en contacto con tus abogados porque quiero el
divorcio –
-esto es una broma, mi amor no tienes por qué
amenazarme con esto para hacerme sentir como una mierda... –Catalina solo está
enojada, Catalina solo está enojada...ella no habla enserio
-perdóname Héctor pero esta enfermedad me
supero...no creas que no comprendo porque actuaste como lo hiciste, yo sabía
que era un error haberme ido con Gregory pero algo no estaba bien contigo y veo
que no me equivoque con respecto a esa mujer...solo quiero que sepas que te amo
a ti y solo a ti –yo lo sé Dios mío, yo sé que mi mujer solo me ama a mí –pero
el amor no es egoísta y sé que estoy en una especie de neofase de latencia como me explico Trace y que las cosas se
complicaran en cualquier momento y lo mejor que nos separemos ahora que estamos
a tiempo –cierro los ojos, tengo que pensar en algo
-Catalina yo también te amo y no me pidas que
me aleje de ti porque sabes que no puedo...por favor todo este tiempo, piensa
en ello mi amor por favor –por qué algo me dice que no la podre hacer cambiar
de parecer
-no insistas Héctor, por favor sal de la
habitación o le pediré a Trace que te saquen a la fuerza...estoy agotada y
quiero descansar –se reclina y reposa su cabeza en la almohada...
Salgo de la habitación y no sé a dónde
dirigirme, tengo que pensar en algo, Catalina no está jugando con esto, lo
sé...solo lo sé. Dios si la pierdo y mi corazón no lo soportaría...
CATALINA
No soy la mujer que él necesita a su lado...sé
que esto le dolerá pero lo superara, no puedo darle hijos...no puedo prometer
estar a su lado cuando más lo necesite...no puedo sencillamente ser la mujer
que destruya sus ilusiones.
Cuando le mencione lo del divorcio fue como una
espada afilada que atravesaba mi garganta. Esa mujer significa mucho para él,
no es por su hermana, es por lo que ella significa en su pasado y aunque le
dije todo eso cuando nos enfrentamos en la oficina de Héctor al final ella ya
gano por adelantado. Dios le amo...por qué todo tiene que ser tan injusto...
Solo sé que no hay vuelta de hoja...
29 comentarios:
Buuuuuenisimooo como siempreee =) Pero tenia que aparecer tra YEGUA grrrr !! Pucha quiero que se mejore cataaa poh no seas malitaaa =) besos linda y esperamos el siguiente
q lloro como.magdalrna y a esa Vanessa la odio .... y mira q si la desesperacion mezclada con los celos es fatal pero es q se dicen cosas tan hirientes q siento el.dolor de ambos .... nena maravilloso cap porfa no dejes de escribir se q toda historia tiene un fin asi q no te pedire q esta no lo tenga pero necesitas seguir escribiendo eres muy buena ....
besos ya te comparto
Me encanto este capitulo.. si que me ha llegado..he llorado, cada frase ha tocado mi corazón... ansiosa por saber como sigue el proximo capitulo...Maldita Vanessa..
Genial genial... vaya tremendo capítulo... dios no tengo el corazón en un puño... directamente mi corazón se ha parado mientras que leía el capítulo... eres grande!!
Uuuufff tremendo capítulo!te sacaste un súper as de la manga!estoy en shock y todo.....buenísimo es quedarse corto....es leer este capítulo,y es ir leyendo con el corazón encogido esperando la estocada final en mi corazón!x dios cuanto se aman!y x dios q acabe bien la historia!
Besitoss genia!;))
Uffff me has dejado muy triste, pobrecilla q duro es pasar x está situación, si ya es dura su enfermedad, encima ahora quiere separarse de él para q él no sufra, lo q ella no sabe es q va a sufrir más sin ella. Un capítulo buenísimo, lo haces muy bien. Besos.
Eres un crack...fuajjj me dejas... que no se por donde vas a salir para el proximo capitulo...me encantas
jajajaja otra yegua Constaza??? ustedes son las que son las mejores ;) gracias por todo, besos de colores, hasta el lunes :*
Jelly??? se acaba el tiempo para ambos, dejemos que las cosas sigan su curso...todo comienzo tiene final,para que alargar lo que en su esencia esta bien...esas peleas de ambos son para darse contra la pared :( gracias por tu apoyo en todo esto, besos de colores...hasta el lunes
jajajaja esa se convertira en una innombrable Evelyn, es un placer poder lograr en ustedes esta conexion, besos de colores y hasta el lunes
jajaja Anabel ustedes son las que hacen esto realidad, gracias por su apoyo...acercándose al final se iran convirtiendo en mejores. besos de colores y hasta el lunes
Aaliyah seguramente acabara bien...no he prometido un final feliz pero te aseguro que uno bien bueno, besos de colores y hasta el lunes
Vito para que estos cabezaduras entiendan tiene que pasar es un verdadero milagro...esperemos para ver que pasa el lunes, besos de colores preciosa
jejeje Eva no me des ideas...gracias por seguir aqui hasta el final, prometo esforzarme porque hasta el final todo sea un verdadero regalo para ustedes...besos de colores y hasta el lunes.
Me encanta! Qué capitulazo! Estaba leyendo y sentía como si fuese ella, como si pudiese sentirlo en mi propia piel. Cuantos sentimientos y sensaciones desprenden esta pareja. Eres una gran escritora y espero que algún día te animes a publicar tu historia en un libro.
Un beso enorme y un saludo desde Barcelona :D
Nena!jajajajaj...si me aseguras que uno bien bueno!seria que Vanessa se vaya a freír espárragos y Catalina y Héctor con un felices para siempre!jajaaja
:( Aaliyah mejor concentrémonos en un buen final ;)
besos de colores para ti Saray...con saber que hay personas como ustedes que valoran mis escritos me doy por bien servida...te espero el proximo lunes con un nuevo capitulo :*
Aiii madre mia que capitulo!!! pero me haces llorar mucho eee. Espero que se recupere y tengan un final felizzzz!!!
Un monton de besoss!! nos vemos el lunes
Madre mia, excelente capitulo, lleno de sentimientos, que me han tocado muy de cerca hasta el alma, es muy triste toda la situacion, la vida es injusta de muchas maneras..........esperemos las cosas mejoren en el proximo cap, me estoy quedando seca d etanto llorar, y si muere Cata............nooooooo
Besitos y hasta el lunes nena...
Woe Ave ne dejas con un nudo en la garganta de tanto llorar y es q ESA vanessa no tiene una pizca de verguenza??? Mira q asegurar q ella se qeda con Hector si sera vibora la maldita!!!!! Sigue asi preciosa q tu capitulo estuvo megasuperwow jajaj.nos vemos el lunes Dios mediante cuidate BESOS
montones de besos de colores para ti Rebeca, siento que cause tanto sentimiento en ti pero en realidad es hermoso que puedas conectar con cada trama...hasta el lunes
jejejeje por favor no te seques aun que todavia no acaba la historia, esperemos para ver como se llevan las cosas hasta el proximo capitulo, besos de colores Zhayda, nos estamos leyendo
eh Zule ya te extrañaba por aca ;) esa vanessa sera una piedra en el zapato pero veamos como salen las cosas, como siempre hasta el proximo capitulo, besos de colores preciosa y gracias :*
Maldita sea esta historia me va a matar de la tristeza.... Maldita zorra esa no se que se cree! Solo quiero que aparezca el donante para Catalina!!!!
OMG !!!!!!! Madre mía!!!!! Según.leía me ahogaba con él sufrimiento. Tanto dolor no es san. Pobres. A Vanesa fuera lapidala o lo q sea pero q no sufra mi chica. Espero ansiosa el lunes con desesperación.
Eres muy buena q digo buena buenisima en esto. sigue escribiendo y mi gracias
:O Maricela jejeje que apasionada eres ;) espero no matarte de la tristeza :( dentro de pocas horas nos volveremos a publicar, besos de colores y espero verte por aqui nuevamente
Beybi ya casi es lunes ;) estamos en la recta final y el sufrimiento es inevitable :( gracias por leer estos capítulos, besos de colores y hasta dentro de poco
Uuff!! Stos ultimos capitulos me tienen el alma en un puño, no hago mas q llorar!! Y q guay un personaje cn mi nombre, aunq sea un poco perrilla, sq es un nombre qno se usa muxo ni en libros, ni series, ni nada!! X eso m hace ilu
Bss wpisima y deja de hacerns tanto de sufrir...
Publicar un comentario