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CAPITULO XVI



Alguna vez has sentido que la vida no acaba cuando mueres. Alguna vez te has puesto a pensar que nada en la vida tiene sentido cuando tú has perdido el derecho de sentir. Mañana se casa el hombre que amo, acaso me ha amado alguna vez. Por Dios se casara con la mujer que puede darme o quitarme la vida...

Sostengo la maldita invitación entre mis manos...esto debe ser un chiste, eso solo lo hace ella para mortificarme, Héctor no puede casarse con ella...por Dios apenas tenemos un mes de habernos divorciados...siempre la amo, siempre fue ella...

Rompo en mil pedazos esa estúpida invitación, voy a deshacerme del sobre cuando noto que trae una nota con el
Espero te encuentres de humor para venir a nuestra boda. De solo imaginarme lo que tienes que estar sintiendo no puedo evitar henchirme de orgullo, quiero que sufras todo lo que sufrí cuando él me abandono por ir tras de ti. Quiero que vivas en carne propia como el hombre que amas se casa con otra mujer. Oh por favor no faltes, nada de esto tendría sentido sino lo presencias con tus propios ojos. Quiero ver en ti  lo que se siente ver como con una sola palabra perderás todo lo que tienes
Vanessa
P.D tómalo como un regalo de mi hermana y mío...no sé qué tenías de especial que nos quitaste a los dos hombres que amábamos, pero ahora no tienes a Gregory y yo me quedare con Héctor...todo vuelve a su curso

La maldigo mil veces y más...de eso iba todo, como pudo hacerme esto Héctor...por qué no espero a que me muriera...

-hola bebe...estamos teniendo problemas, papá se nos va a casar con una víbora de siete cabezas, tan venenosa como un matarratas. No entiendo porque papito me hizo esto, pero no te lo puede hacer a ti –acaricio mi vientre plano como una mesa, Trace me dijo que estoy alrededor de mi cuarta semana de gestación...esa noche no solo me despedí del hombre que amo, sino que me dio el regalo más grande

Me levanto muy de mañana, tengo que ir a esa estúpida boda, al menos será algo privado en el juzgado de la ciudad...no puedo creer que Héctor no se haya ido de la ciudad tras nuestro divorcio, no entiendo porque se va a casar con ella aquí...algo no encaja aquí...sean cuales sean los motivos tengo que impedir esa boda...no me voy a morir sabiendo que esa perra será la madrastra de mi bebe...primero hago un documento donde Héctor no tenga derechos sobre mi bebe si eso fuera posible con tal de que esa víbora rastrera no ponga ninguna de sus garras sobre mi bebe

Denis insistió en acompañarme pero le mentí diciendo que me iba a encontrar con Héctor, así que solo tengo que concentrarme en llegar primero que la zorra esa y poder hablar con Héctor
Me tomo mi tiempo en entrar a la notaria...él está mirando a lo lejos, para ser el día de su boda no está para nada emocionado, como si notara mi presencia se gira y su expresión abstraída ahora es de terror, vaya no esperaba verme...bueno yo tampoco tenía planeado verlo en estas circunstancias...de hecho esperaba que todo fuera una farsa de esa zorra para mortificarme. Nos encontramos a mitad de camino...que le sucede a Héctor, luce tan devastado...
-que haces aquí –
-no te puedes casar con esa mujer –
-de que estas hablando –genial ahora lo va a negar todo
-sé que te vas a casar con Vanessa...ella me envió una tarjeta de invitación –ahora su rostro palidece
-que ella hizo qué –
-Héctor por favor no te cases, ella no te ama...ella no es la mujer que tú necesitas a tu lado –sus ojos reflejan agonía y eso hace que mi corazón se detenga o casi muera
-Catalina no puedes estar aquí...debes irte –toma mi brazo y trata de sacarme
-detente Héctor, yo tengo una invitación por parte de tu prometida y tengo todo el derecho estar aquí –
-has enloquecido, no puedes quedarte aquí...no quiero que presencies esto –
-pues yo no quiero que te cases e igual lo vas a hacer –
-Catalina tú no lo entiendes, por favor has esto por mí –
-entonces explícamelo...por qué te vas a casar con esa mujer, tan solo llevamos un mes divorciados...es que nunca me amaste –oh Dios dije que no iba a llorar y aquí estoy mendigándole que no se case
-Catalina no dudes que siempre te he amado...por favor pequeña has esto más fácil para mí –limpia mis lagrimas
-está bien dije que esto no lo sabría nadie pero es esto o que destruyas tu vida y la mía –
-de que estas hablando –
-el día que sufrí el pre infarto Vanessa fue a visitarme y me dijo que ella era compatible conmigo y que primero muerta antes que servir de mi donante –observo a Héctor pero no veo nada, es como si no le importara
-eso ya lo sé pequeña –empieza mirar el reloj
-y sabiéndolo te vas a casar con esa zorra...oh Dios mío como puedes decir que me amas y vas a hacer esto –
-porque siempre tienes que esperar lo peor Catalina...no debo estar diciéndote esto, pero te has puesto a pensar que si no me caso por amor con Vanessa es porque existe algo más poderoso –
Oh Dios mío, me llevo una mano a mi boca y otra a mi vientre
-Héctor no puedes hacer eso...Héctor...estoy embarazada –Héctor abre sus ojos como enormes platos
-oh Dios mío –bueno no esperaba que reaccionara así
-ahora entiendes porque no te puedes casar con ella...no la amas y ella va a impedir por todos los medios que nuestro bebe este a tu lado –Héctor se sienta en un banco cercano y hunde la cabeza entre sus manos
-debo hacerlo Catalina...ahora con más razón –levanta su mirada y sus ojos brillan, me muerdo el labio no quiero seguir llorando
-no...no hay razón para que esa mujer nos separe –le digo con mi voz entrecortada por las lagrimas
-sí Catalina...ella me va a dar la oportunidad de verte vivir de nuevo y además de que nuestro hijo crezca al lado de su madre...oh Señor me vas a dar un hijo –ahora lagrimas salen de la comisura de sus ojos, las cuales se limpia rápidamente –mi amor vete antes que ella llegue, no demora en arribar y no quiero darle el gusto de verla regodearse en nuestra desgracia -
-no me voy a ir porque no te voy a dejar solo en este momento...Héctor luces fatal, por qué no me lo dijiste antes, hubiésemos encontrado una solución a esto...solo has pensado en ti, como crees que yo puedo aceptar que esa perra me done su medula a costa de nuestra felicidad, no puedo aceptarlo –
-Catalina la necesitas para nuestro bebe –su voz se quiebra pero no voy a ceder
-crecí sin mis padres Héctor...nuestro bebe te tendrá a ti, por qué tienes que hacer esto, no puedes ser tan egoísta...tienes que dejarme ir –

-vaya, vaya...pero a quien tenemos aquí –me limpio las lágrimas antes de girarme y encarar a esta desgraciada
-acaso no enviaste una invitación para que no faltase –mis ojos le tiran dagas
-no te creí con el valor suficiente de hacerlo –se pone junto a Héctor...oh Dios y lo besa, lo besa frente a mí...abrazo mi vientre y miro en otra dirección...contengo mis lágrimas...muerdo fuertemente mi labio inferior para disimular el temblor de mis lágrimas contenidas
-espero no haberme tardado tanto cariño –le limpia el labial de los labios de mi hombre...maldita perra, Héctor no es capaz de mirarme...oh Dios como puede pretender que viva después de esto, en qué cabeza cabe que aceptare el donante de esta arpía
-por favor Vanessa acabemos con esto rápido –al fin dice algo Héctor que rompe esta tensión tan horrible

Ellos entran y yo me quedo unos minutos más en el pasillo...tengo que ser fuerte...
El juez empieza a hablar y al primero en preguntarle es a Héctor...mira en mi dirección y mirándome a los ojos dice un “sí” solo yo puedo verlo a través de sus ojos...me ha mirado pidiéndome perdón...ha dicho sí...sí a una vida sin un nosotros...ha dicho sí a vivir sin mí...
Luego el juez se dirige a la maldita víbora y ella con una amplia sonrisa se dirige al juez
-señor aquí no va haber boda –
-que estás diciendo –Héctor está sorprendido y yo no sé si saltar de la felicidad o llorar por la misma razón
-señor juez nos puede dejar solos por favor –el juez igual de sorprendido asiente y sale de la instancia
-me puedes explicar de qué va todo esto –
-querido creíste que si me casaba contigo iba a salvarle la vida a tu puta –Héctor enseguida se pone rojo de la furia
-cuida las palabras con las que te diriges a Catalina –
-no te preocupes que las que ella me dirá serán igual de halagadoras –Dios estoy muda de la impresión –Héctor nunca planee casarme contigo, nunca planee salvarle la vida a ella...solo me estoy vengando de ustedes dos, solo quería que sufrieran lo del divorcio...solo quería que ella presenciara cuando dijeras si...solo quería que ella viviera lo que yo viví cuando tú me dejaste por perseguir esa estúpida venganza para resultar enamorado de ella...te odio Héctor, siempre estuve allí para ti y que hiciste sino darme migajas de tu atención y que creíste que yo iba a soportar tus migajas y te premiara devolviéndole la vida a tu eterno amor...me has lastimado y eso jamás te lo perdonare –
-cada vez te conozco menos Vanessa, Catalina necesita vivir...si me quieres a mí, tómame pero no le niegues la oportunidad de vivir –oh Dios es tan horrible ver como Héctor le suplica a esta mujer por mi
-Héctor quiero tu corazón y ese jamás será mío porque le pertenece a esa bastarda...ella no solo me destruyo mi vida, le destruyo la vida a mi hermana...solo le estoy dando lo que se merece –
Oh Dios mío...Héctor se arrodilla delante de ella, camino hacia él...no puedo permitir que haga esto, no por mí...oh Señor
-Héctor por favor no hagas esto...mi amor no te humilles por mí, ella no va a cambiar de parecer –
Héctor en ningún momento me mira, solo tiene los ojos fijos en ella y veo como unas gotas brillan a punto de rodar por sus mejillas
-Vanessa te lo imploro, nos iremos a donde tú me lo pidas y te juro que tendrás mi corazón pero por favor ten misericordia y dona tu medula para Catalina...si me amas como dices hazlo por eso que dices sentir por mí y te juro que no volveremos a saber nada de Catalina –mi corazón se cierra en un puño puede amarme tanto Héctor aun a costa de su sufrimiento
-no puedo creer que tanto la ames, pero dime algo más convincente porque tu amor por ella no me produce más que aberración –oh Dios esta mujer es cruel. Héctor deja caer sus mano al suelo y ahora no la mira, no puedo soportar verlo ahí humillado delante de ella solo porque me ama...no puedo soportarlo
-Vanessa...Catalina está embarazada...por favor en su estado ella no soportaría darle vida a otro ser...moriría en las primeras semanas de gestación o provocaría un aborto, Dios!!! Mujer tienes que tener un corazón en algún lugar de tu cuerpo...tanto la odias que tu humanidad no te dice nada, podrías vivir con la muerte de dos inocentes –su voz es desgarradora, estoy paralizada...como puede ser tan cruel, como puede ser así con el hombre que dice amar
-no tengo corazón Héctor...te encargaste de arrancármelo cuando te suplique que no me dejaras, empecé albergar tanto odio hacia ti...cuando Estefanía me lo conto todo desee matar a esta infeliz...pero guarde todo lo que sentía por ti porque no había razón que te confesara mi amor por ti, siempre me trataste como tu hermana menor...cuando me entere de que ella estaba enferma sentí que la vida que me arrancaste me era devuelta y por curiosidad me hice el examen de compatibilidad y cuando dio positivo lo llame justicia divina...por culpa de ella mi hermana se quitó la vida y cuando dijiste que te vengarías de Gregory a través de ella no te creí por eso te suplique que no me dejaras porque ese día que vistes las fotografías lo supe todo...supe que jamás me amarías y que nunca llevarías a cabo tus planes porque con solo verla a través de un retrato te había robado el corazón –
-pero está embarazada Vanessa –su voz apenas es audible
-mi hermana también lo estaba Héctor –
-pero eso no era culpa de ella, Catalina nunca supo de la existencia de Anna hasta que me conoció...te das cuenta de lo retorcido que suena eso, estas tan enferma como lo estuvo tu hermana –
-quizás pero no tienes nada con que probarlo...ahora levántate que si arrodillado creíste que me convencerías te equivocaste porque eso me hace despreciarte aún más...no puedo creer que llegues a tanta humillación solo por el amor que le tienes a esta maldita...adiós para siempre Héctor...sufre lo que sufrió Anna, lo que sufrí yo con tu desprecio –empieza a caminar lejos de él hacia la salida y me mira –y ojala que ese bastardo y tú se mueran antes de que haya alguna otra esperanza –mi sangre se hela como puede haber en el mundo alguien tan cruel y despiadado como ella
Sale de la oficina del juez y no pierdo mi tiempo  viendo como desaparece su  reflejo...voy hasta donde Héctor que sigue tumbado en el suelo llorando...toco su hombro y antes de que me incline frente él, levanta sus manos y las aferra a mí...lo abrazo y paso mis dedos por sus cabellos dándole consuelo
-perdóname mi amor...perdóname, solo yo soy el culpable de tu desgracia...nunca debí haberte conocido, nunca debí hacerlo –ahora besa mi vientre –perdóname mi amor hice todo lo que pude para salvar a tu mami y a ti pero no pude –
Ahora se levanta y me envuelve en sus brazos, no tengo palabras que decirle...salimos también del despacho y Héctor habla algo con el juez...salimos hasta la calle, conduzco hasta la casa. Héctor está muy conmocionado y a duras penas se puede mantener en pie.
Subimos hasta nuestra habitación y hago que se acueste...le pido a Ibby que haga un poco de té y me siento junto a él, nunca lo había visto así. Solo hasta hoy pude comprender cuanto me ama Héctor...tantas veces ha dicho que no merece mi amor pero soy yo quien no merece un amor tan desmedido...un amor que no conoce ni principio ni fin...

HÉCTOR
Perdí muchas cosas en mi vida...pero perder a la mujer que amo y el fruto de nuestro amor no conoce límite de crueldad. Para Catalina fue muy duro verme humillado delante de Vanessa pero eso para mí no tuvo importancia alguna, alguna vez leí una obra de Susan Elizabeth Phillips en la cual decía que nadie te puede humillar si tú antes has decidido que no puedan  hacerlo o así lo decidas...haría cualquier cosa por ella y nuestro bebe, cualquier cosa...
Han pasado seis meses desde que estuve a punto de casarme con esa maldita mujer sin entrañas...las mujeres de esa familia me destruyeron la vida pero ella, ella se llevó el premio mayor porque al menos lo de Anna me llevo a encontrarme con la mujer que amo pero esta infeliz me ha quitado la razón de mi existencia, me lo quitado todo...
Estoy en la sala de espera de maternidad...sí, Catalina ha sobrevivido a pesar de las profundas crisis en las cuales se ha sumido en el transcurso de todo estos meses...pero hoy antes de que amaneciera le empezaron contracciones y a pesar de que aún no es el tiempo tuvimos que venir por urgencia a la clínica, había rompido fuente y la hemorragia estaba fuera de control...Trace me impidió entrar al quirófano...es un milagro si me bebe se salva...sería algo sobrehumano si mi Catalina sobrevive después del parto de ahí que ella dice que mi presencia lo complicaría todo...
Todos a excepción de Aurora me están acompañando...su bebe nació hace tres meses y no quisimos que se desprendiera de él en estos momentos, aun no lo sabe y sé que cuando se entere me querrá matar pero no es el lugar para que ella este con nosotros...
Se hace una eternidad esperar...Trace no me da razón y estoy a punto de perder la poca paciencia que me queda...
Trace sale...no me mira...
Oh Dios mío...
No me importa lo que vaya a encontrarme detrás de esas puertas...entro corriendo...
Están retirándole todos los tubos a Catalina...no veo a nuestro bebe por ningún lado...
Todos se abren como el mar rojo a medida que avanzo con mis pasos lentos y dudosos...
El quirófano queda vacío...
Allí está mi amada...allí está mi vida...
La abrazo y esta tan fría, besos sus labios intentando que responda...lloro...quizás solo grito...quizás no doy para articular palabra alguna...
Se ha ido...me desplomo en el frio piso del quirófano...
Siento que alguien trata de levantarme pero no quiero hacerlo...
Alguien me llama pero no quiero oírlo...
Un frio abrumador me llena...algo se ha muerto dentro de mí...se ha ido y me ha dejado...
Levanto mis ojos a la camilla donde estaba el cuerpo sin vida de mi ángel y se la intentan llevar pero se los impido
-noooooooooo!!!!!!!!!! –grito con agonía, nuevamente me aferro a su cuerpo
-Héctor tienen que prepararla –escucho la voz de Gregory
-déjenme junto a ella...no se la lleven –suplico aferrado a mi ángel
Pero ya no solo es Gregory quien me agarra, también es Cesar...forcejeo con ellos y cuando no me pueden contener un hombre fornido que no conozco me inyecta algo
-que...que...me... –


Todo se siente tan pesado...trato de levantarme pero estoy amarrado...pero qué demonios
-alguien me escucha –grito en la habitación vacía
-maldita sea que alguien aparezca y me explique qué está pasando –
Espera un momento...Catalina!!! Ella...no...
-maldición suéltenme... – Trace entra a la habitación acompañada de Gregory
-suéltame trace, no tienes por qué tratarme como si fuera un enfermo mental, maldición mi mujer... –no doy para decir las palabras...cierro mis ojos, quiero que esto sea un horrible sueño
-sino te calmas no podré dar la orden para que te suelten –
-Héctor por favor cálmate –
-lárgate de aquí Gregory...lárguense todos de aquí –me retuerzo pero me tienen atado como si fuera un demente que se quisiera hacer daño
-piensa que tienes una bebita por la cual vivir –
¿Una bebita? Mi pequeña Catalina ¿sobrevivió?
-ella vive??? –oh Señor gracias...mi voz es apenas audible
-solo cálmate y la podrás ver –son las palabras de Trace
-te lo juro Trace suéltame y no hare ninguna estupidez solo déjame ver a mi hija –
-pero tienes que estar preparado...sabes que nació pre termino y la tenemos en observación, su estado de salud es delicado...sus pulmones no se han madurado y por el estado en que la concibió...Catalina, está muy por debajo del peso –
-Héctor perdimos a Catalina...tienes que ser fuerte para esa pequeña...por favor es tu hija –las palabras de Gregory son una suplica
Al cabo de unos minutos unos enfermeros me desatan...les he pedido un poco de tiempo, debo prepararme, mi bebe no me puede ver en este estado...al salir Gregory me espera en el pasillo
-la hemos perdido –sus palabras son suficiente para recordarme que mi hija solo me tiene a mi
-donde esta ella –no puedo siquiera mirarlo
-ya todo está listo...estuviste sedado toda la noche –
-eso quiere decir que llevo un día dormido –
-estabas fuera de control Héctor...tenían que hacerlo o hubieses cometido una locura –
-voy a ver a mi hija... –los ojos se me llenan de lagrimas
-te estaremos esperando en casa –Gregory se va y camino hasta pediatría

Cuando llego allí, Trace me está esperando...me colocan un traje adecuado para poder entrar...
Trace me indica lo básico y le pido que me deje a solas y ella asiente...
Camino junto a la incubadora pero al ver a mi bebe tan frágil no puedo evitar derrumbarme en sollozos...
No sé cuánto tiempo permanecí así pero en ese tiempo nadie me molesto...
Me reincorporo y quisiera tomar a mi bebita en mis brazos pero esta tan frágil que la podría lastimar
-quiero que sepas mi amor, que mamita te amó demasiado y me hizo prometerle que te diera todo mi amor...que nunca me cansara de luchar por ti...que fuera tu amigo, que fuera el mejor padre que pudieses tener...solo estamos tu y yo pequeña...tu madre fue una luchadora y tú tienes que ser igual que ella. Voy solamente a darle mi último adiós a mami pero te prometo que no me voy a despegar de ti ni un solo momento después de eso...te amo mi pequeña Catalina, te amo...-salgo de allí con el alma en un hilo, se supone que los hombres somos fuertes, que no lloramos pero maldición esto me ha superado...perder a Catalina es una cosa pero de solo pensar que mi pequeña retoñito no supere esto será mi estocada final...

EL FUNERAL
Me doy una ducha y me rasuro...me veo frente al espejo y al menos me veo decente...mis cabellos cada vez se tornan más blancos...ahora si siento que estoy envejeciendo, no solo es mi apariencia es todo esto que llevo en el alma...
Me coloco mi americana negra y tomo en mis manos la flor de madera que compre esa vez en el festival de primavera...
Todo ha sido organizado en nuestro jardín...allí será enterrada...es lo más lejos que puedo permitir que este de mi...
Todos están esperándome, uno a uno me dan sus condolencias pero no reconozco a ninguno...todos son como un borrón...
Llego hasta el féretro y levanto la tapa del ataúd...
Nuevamente comienzo a llorar y un brazo se posiciona en mi hombro...no miro quien es...pero estoy seguro que es Gregory, solo él sabe lo que estoy viviendo...
Me inclino y poso mis labios sobre los pétreos y fríos labios de mi ángel...
La ceremonia inicia...no entiendo lo que dicen...solo me concentro en recordar los momentos que viví junto a la mujer que le dio sentido a todo lo que tenia
Empiezan a bajar el ataúd y quiero que me entierren junto a ella, quiero morir junto a ella pero entonces recuerdo a mi pequeña Catalina...
Uno a uno se despiden de mi...quizás me alientan o quizás dicen cosas buenas de mi amada, igual no puedo procesar nada de lo que me han dicho
-Héctor ya todos se han marchado –es la voz de Gregory
-quiero estar otro rato aquí –coloca su mano en mi hombro
-está a punto de llover...entra a la casa –me giro y lo miro
-quiero estar aquí –
-Héctor se ha ido para siempre –que bien ahora me toca consolar a este pendejo, pasó una mano por sus hombros
-deja de ser marica y para de llorar –
-deberías tomar ese consejo para ti también –ahora nos abrazamos –sabes que ella te amo como nunca lo había hecho, verdad –
-se supone que esto hará mejor las cosas –le digo en broma
-no pero te hará seguir adelante...no la acabes Héctor, solo mantente en pie –

Gregory se marcha y me deja solo con mi dolor...como me había dicho empieza a caer un profundo aguacero...estoy allí arrodillado junto a la tumba de la única mujer que ame en mi vida...solo me levanto hasta que siento que los huesos se me congelan...la lluvia no se ha llevado mi dolor pero si se ha llevado las lágrimas que por ahora podían derramarse...hasta luego mi amor...te has llevado la mitad de mi vida, la otra mitad la tiene nuestra pequeña...ustedes tienen todo de mi...

LA PEQUEÑA CATALINA

-donde está mi niña –es lo primero que pregunto al llegar a casa
-creo está en su habitación señor –
Subo para verla...hace diecisiete años que nació mi bebe, es una hermosura de niña, odia que la llame así, pero ella nunca dejara de ser mi bebe...es idéntica a su madre pero desgraciadamente saco lo peor de mi...no sé cómo me pudo aguantar tanto tiempo Catalina...a veces creo que voy a perder el control con ella pero me habla a mi corazón y no hay nada que no le pueda dar...nada
Hoy he llegado temprano, quiero sorprenderla...mañana comenzara el festival de primavera y quiero llevarla conmigo, quiero que conozca el lugar donde su madre y yo disfrutamos por primera vez de nuestro amor
Entro sin tocar a su habitación...
-pero qué demonios sucede acá –Catalina se pone blanca como papel –Maximiliano sal de la cama de mi pequeña Catalina antes de que te mate –
-papá!!! –grita Catalina y envuelta en una sábana se coloca delante del imbécil de Maximiliano
-oh Dios...Catalina anda a vestirte –doy un paso adelante pero ahora es Maximiliano quien se pone delante de mi niña
-tío... –
-que tío ni que mierda...lárgate de mi casa Maximiliano antes que cometa una locura –
-papá deja de comportarte como un irracional –empieza hablar mi niña –Max por favor cámbiate mientras hago entrar en razón a mi papá –oh Dios le habla como si él fuera que se yo
-Maximiliano lárgate de mi presencia –
-tío no me voy a ir hasta que no se haya calmado –lo miro detenidamente y veo que esta como un escudo protector delante de Catalina
-piensas que podría hacerle daño a mi niña –me llevo las manos a la cabeza –mira Maximiliano el único que tiene que estar preocupado por su seguridad eres tú, así que mueve tu culo de mi casa antes que Aurora o Cesar vengan y recojan tus restos –
Catalina da un grito ahogado
-papá has enloquecido...amor por favor vete que yo puedo manejar esto...por favor –Dios no puedo creer lo que están viendo mis ojos...mi niña lo ha llamado “amor” pero que puede saber ella de amor si ella es una bebe y lo peor es la forma en cómo se miran pero por el bien de ese desgraciado que seguro ha engatusado a mi niña sale con sus ropas en sus manos y se marcha
-Catalina colócate ropa –pero como siempre se planta y me mira como si quisiera fulminarme con la mirada –mira Catalina Mafort Mellan has cometido la locura más grande de tu vida bajo mi techo...ahora obedece que aquí yo sigo siendo tu padre –
Pero he mencionado que esta niñita es tan testaruda como su madre...tira de la sabana que la cubría y me quedo congelado, pero reacciono y me volteo
-a ver papá hasta donde yo sé nunca tuve niñera porque has sido mi mamá y mi papá –escucho que abre unos cajones seguro está buscando ropa interior –hasta solo hace dos años que has decidido colocarte en frente de la editorial...Dios!!! me diste la patética charla acerca del desarrollo y como utilizar unos tampones y te aterra verme desnuda, te informo que a Max no hay cosa que le guste más que verme desnuda –
-es suficiente muchachita insolente, no te voy a permitir que me hables así...soy tu padre –
-y el hombre aparte de Max del cual no me importa que me vea desnuda, por Dios no es la primera vez que me ves desnuda –se pasa una blusa por encima mientras busca será un short
-eres una niña –
-papá tengo diecisiete años, por si no te has dado cuenta mi cuerpo es el de una mujer y las cosas que estaba haciendo con Max no son de niños –
-oh Señor tu madre debe estar odiándome por lo mal padre que he sido...en que me equivoque –
-en serio papá, te estas escuchando...mi madre estaría orgullosa de la mujer que has criado, no te volviste a casar, has sido mi ejemplo a seguir y no estaría más orgullosa de mi por haberme enamorado del hijo de mi tía Aurora –
-enamorado?? Que saben ustedes lo que es amor –
-papito –ya está...ya entramos en la etapa de la manipulación –a que edad perdiste tu virginidad
-Catalina no cambies el tema...esto no se trata de mí, esto es sobre ti...eres mi pequeña Catalina –sus ojos brillan, oh Señor que no valla a llorar porque al igual que su madre empieza a llorar y puede pedirme lo que quiera
-papito...tienes que entender que he crecido, antes estaba segura que lo mejor que pudiste hacer cuando perdimos a mi mami fue que no te casaras –le limpio las lágrimas que salen de sus hermosos ojos –pero eso no estuvo bien, en algún momento yo también me iré y te quedaras solo...tienes que entender que he crecido –
-pero ese imbécil de Maximiliano te ha mancillado –
-oh papito te estas escuchando...en que época crees que vivimos, en el medioevo?? Max y yo nos amamos y no pudimos evitarlo...pareces como si hubieses visto no sé qué acto pornográfico...te recuerdo que solo estábamos abrazados...la acción ya había terminado –
-oh Dios mío porque esta niña tuvo que haber sacado mi lengua –ahora se ríe y me abraza, la envuelvo en mis brazos pero no demasiado tiempo, no puede ver que me gano –anda a ducharte que hueles a ese imbécil –
-papá deja de llamarlo imbécil porque hasta donde yo se lo adoras...quiero que te disculpes con él, no quiero que trates de esa manera al hombre que amo –se va canturreando no sé qué canción y me dirijo  hasta el jardín...necesito pensar, esta niña es un demonio...

LA EXPOSICION
-papito!!! –mi pequeña Catalina me mira y sus hermosos ojos azules se llenan de lagrimas
-te ha gustado la sorpresa –aclaro mi garganta...nunca me ha gustado que mi niña me vea llorar
-donde tenías todas estas fotos –me abraza y llora como una niña, llora como cuando iba donde mí y me pedía que le hablara de Catalina
-una vez le prometí a tu madre que le daría esta sorpresa pero no me alcanzo el tiempo mi amor –le beso sus cabellos y la guio por todo el salón
Hoy celebramos el cumpleaños número treinta de mi pequeña Catalina y sí, hoy también se cumple treinta años de la muerte de mi amada Catalina. Preparamos un salón de la casa con todas las fotografías que le tome a Catalina durante el tiempo que estuvo a mi lado.
-era hermosa papito –la abrazo fuertemente
-era igual a ti mi bebe, a diferencia que sacaste mi mala educación, la hubieses enloquecido pero te hubiese amado el doble, uno por ser su hija y otra porque sacaste lo que más amaba de mí y era mi irrespeto...ella era un ángel mi amor, se sonrojaba con cualquier cosa que decía –
-esta foto donde la tomaste –
-esa foto la tomo en el festival de primavera, estaba celosa de una amiga mía –
-por qué seria –me mira inquisitivamente y la abrazo nuevamente –papito quiero que este salón siempre permanezca así...quiero que todas esas fotografías cuelguen de estas paredes –
-tus deseos son órdenes –

-papi...papi –entra gritando mi pequeña Aurorita, la tomo entre mi brazos
-que sucede mi estrellita –hace un puchero será que puede dejar de ser tan manipuladora como su madre
- teto y Greg no me dejan jugar porque dicen que las niñas somos unas lloronas y no sabemos perder –
Catalina le da un ataque de risa...la misma novela de todos los días. Héctor es el hermano gemelo de mi Aurorita, ese pillo me maneja a su antojo igual que esta pulguita. Greg es el nieto de Gregory y se las lía con Héctor para hacer llorar de vez en cuando a Aurorita.
-vamos mi amor...dejemos a tu abuelo un momento a solas y tú y yo vamos a darle una lección a esos hombrecitos –
-no mami, déjame aquí con mi papi –me abraza más fuerte y ya consiguió lo que quería –además ya mi papi Max les dio su merecido a esos odiosos –Catalina rueda los ojos
-entonces cual es el objetivo de tu show –
-que mi papi los vuelva a regañar –ahora soy yo quien se ríe
Me quedo con mi estrellita entre mis brazos...esta niñita es la reina del drama igual que su abuela Aurora

-papi por qué una vez vi llorando a mi tío Greg junto a la tumba de mi mami Cata –
-porque tu tío Greg la quería mucho mi amor –
-mmm...abuelito tú nunca me vas a dejar, verdad –
-mi tesorito eso nunca lo sabremos –
-pero tú no me puedes dejar porque entonces quien me defenderá de teto y Greg –
-nadie tiene que defenderte de Héctor y Gregory...ellos te aman y serán los que te cuiden cuando algún tonto quiera lastimarte –
-vale...cuando yo crezca seré tan linda como mi abue Cata –señala una fotografía que tome una vez que descansaba en el jardín
-serás más hermosa que ella mi estrellita –la beso en sus mejillas y la dejo ir

-donde tenías todas estas fotografías –
-solo estaba esperando el momento indicado, por cierto ten cuidado en donde lloras a mi mujer que Aurorita te ha visto llorar a su abue Cata –
-esa niña es una listilla –
-la peor combinación de Catalina y Aurora –
-la sigues queriendo tanto como la primera vez –
-y tú la has dejado de amar –
-entonces me temo que es un mal generalizado –
Empieza a caminar alrededor del salón admirando a nuestra Catalina y lo dejo a solas con su recuerdo...

La fiesta ha terminado...todos se marchan a sus casas y solo quedan conmigo mi Catalina y su familia.
-tío, va a quedarse un rato más aquí –
-sí, Maximiliano...ve ayuda a Catalina con los torbellinos de tus hijos –
-está bien –
-estoy bien hijo...ve con tu esposa –

EL ADIOS FINAL

Camino hacia nuestro jardín, Maximiliano me ha preguntado que si estoy bien...pero no lo estoy...hace treinta años la vida me arrebato a la mujer que amaba y no ha habido día o noche que no la extrañe...tengo todo lo que un hombre desearía pero no la tengo a ella y eso es suficiente para desear no querer vivir más...

Tomo un trago de vodka y me siento junto a la tumba de Catalina
-ya hice todo lo que me pediste...nuestra hija es feliz, tiene a su lado un hombre que la ama y unos hermosos niños que si los conocieras habrías enloquecidos...ahora no crees que ya no tengo más nada que hacer –tomo otro trago de mi copa –eh, contéstame Catalina...solo estamos tú y yo –tiro la botella de vodka contra uno de los árboles y empiezo a llorar
-cuando dejaras de llorar por una muerta Héctor Villianco –
-vaya ahora he llegado al punto máximo de mi locura...ahora siento que te escucho –
-y si te volteas me podrías ver también –
-por qué me haces esto...nunca te pude arrancar de mi mente, menos de mi corazón...nuestra niña era lo único que me mantuvo en pie...ahora que ella es feliz y puede continuar sin mí, ya no tengo una razón para seguir aquí...pero no bastándote con eso vienes y tu recuerdo me atormenta –
-crees que solo soy un recuerdo mi amor –susurra a mis oídos y siento como si fuese real
-te odio Catalina, te odio por amarte tanto...te odio porque ese día te fuiste sin despedirte de mí, entre enloquecido al quirófano y ya te habías ido...solo me quede con el recuerdo de tus labios fríos –
-y no crees que puedes perdonarme algún día –
-quieres que te perdone por dejarme solo...quieres que te perdone porque tu estas más hermosa que nunca, no has envejecido ni un poco y te apareces cuando ya no me queda nada –
Me abraza y siento que es real...mi mente me engaña, eso es...Catalina murió hace mucho tiempo, ella no puede estar conmigo aquí
-llora mi amor...llora todo lo que puedas, yo estoy aquí para consolarte –
-dime que no me vas dejar esta vez por favor...dime que has venido por mí –
-quieres irte conmigo –acuno su rostro en mis manos y tengo miedo que desaparezca
-a donde tú digas te seguiré –
-entonces toma mi mano y sígueme –enlazamos nuestros dedos y empezamos a caminar a través del jardín...pero me detengo –sucede algo, no estás seguro de querer seguirme –es tristeza lo que veo en sus ojos??
-no, no es eso...es solo si te puedo pedir algo –
-que me quieres pedir amor –
-puedo besarte –mi ángel sonríe
-pensé que nunca me lo pedirías –
Por un momento la contemplo...no me importa si es mi mente que ha creado una imagen de ella, no me importa si no es real...solo sé que desde que se marchó nunca la he sentido tan cerca de mi como ahora...
-cuanto me tendrás esperando Héctor –
-no tanto como lo que tú me has hecho esperar mi Catalina –pero es allí donde decido besarla y la traigo contra mí y la sujeto como si fuera a desaparecer en algún momento, pero ella también se aferra a mí con todas sus fuerzas. Sus labios me saben a la gloria del amanecer, suaves, cálidos...son los labios que grabo mi mente, son los labios de la mujer que amo.
Siento su lengua dentro de mi boca y un gruñido se me escapa...mordisqueo su labio inferior y aprovecho para tomar un poco de aire...
-te amo Héctor Villianco...por siempre tuya –
-yo te amo aún más Catalina Mellan y siempre, siempre he sido tuyo –


FIN








EPILOGO

Esa mañana parecía como cualquier otra, pero Catalina no podía estar tranquila. Se levantó y fue hasta la habitación de su pequeño Héctor, todo estaba en orden, su pequeño dormía un profundo sueño. Se dirigió hasta la habitación de Aurora y cuando iba a entrar su esposo Maximiliano estaba detrás de ella
-sucede algo mi amor –le pregunta preocupado
-solo tengo una sensación muy fea que me hizo levantarme tan temprano y he venido a ver cómo están los niños –
Maximiliano la abraza y la reconforta diciéndole que no pasa nada, entran juntos a la habitación de su niña y su pequeño angelito duerme apaciblemente abrazando su oso preferido, aquel que le regalo su abuelo Héctor.
-ves no pasa nada, vuelve a la cama que aún es muy temprano –la alienta su esposo
-déjame ver si mi papá está bien –
-vamos –
Tocan a la puerta del dormitorio de Héctor pero no responde, Catalina se asusta y sin más abre la puerta. Su padre no está en su cama, de hecho no hay signos de que haya dormido en ella.
Catalina esta horrorizada y sale corriendo hasta el jardín trasero donde su madre está enterrada, Maximiliano corre tras ella ignorando que pueda estar pasando por la mente de su esposa.
Cuando Catalina llega hasta el jardín lanza un grito ahogado, intentan correr hasta donde yace el cuerpo de su padre pero su esposo la sujeta contra su cuerpo
-déjame Max, déjame ver que le pasa a mi papá...déjame maldición –forcejea con su esposo pero Maximiliano no le da ocasión de soltarse. Héctor esta tumbado junto a la sepultura de Catalina abrazando un trozo de madera que siempre ha estado allí. No deja que Catalina se acerque porque es evidente que su cuerpo está sin vida.
-mi amor...mi amor...mírame – pero Catalina no entiende razones y al fin la suelta y ella llega hasta el cuerpo sin vida de su padre...
No pudieron dictaminar las causas de la muerte de Héctor...solo los árboles y rosales que llenaban este jardín pudieron ser testigos de las últimas horas de vida de este hombre que en palabras de su hija solo vivió para amarla y amar hasta la muerte el recuerdo de su madre...

NOTA: agradezco a todos ustedes por su apoyo incondicional, nunca se desanimaron y estuvieron conmigo en medio de esta aventura. Los invito para que el viernes 2 de agosto iniciemos una nueva aventura que se llamara  la subasta. Besos de colores gente hermosa y hasta siempre.



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CAPITULO XV


HÉCTOR

-a ver, dame tiempo para procesar esto –Aurora esta que se lanza sobre mí para poder arrancarme la cabeza como mínimo
-vas a ayudarme –no me mira ni un instante y el terror empieza a aflorar en mi interior
-no debería pedazo de soquete pero que otra opción tengo –se sienta y acaricia su abultado vientre y solo en pienso en las palabras de Catalina...será que al ver a Aurora embarazada también le ha afectado en parte
-pero y si se niega a todo esto nuevamente –ahora se muestra irritada, esto empieza a salirse de las líneas
-para eso me has llamado, para evitar que ella retroceda –me mira llena de rabia –y más te vale que cuando hable con ella, la puta resbalosa de la Vanessa haya desaparecido de la  editorial y de tus empresas...todos Héctor hemos estado sufriendo con lo de Catalina pero escogiste a la peor opción para desahogarte, maldición no ves que ella es una amenaza en cierne para tu matrimonio –no respondo nada, yo mismo me lo dije desde un principio

Aurora entra a ver a Catalina y me aferro a todo lo que pueda para que entre en razón...de donde puede sacar que divorciándose de mí puedo reponerme a todo esto. Ella no comprende que aunque se me vaya la vida nunca, nunca la dejare de amar y menos que la distancia haga desaparecer mi dolor...ella es todo lo que necesito.

CATALINA

-sabes que eres una traidora –fulmino con la mirada a Aurora
-y tú la tonta más grande del lugar, como puedes dejarle el camino libre a esa víbora...yo no sé tú Catalina pero así sea por orgullo sabiendo que esa mujer es hermana de Anna menos dejaría que esa especie de arpía se reproduzca –no puedo evitar reírme con su comentario
-si crees que si no me apoyas en esto voy a volver al lado de Héctor te equivocaste amiga, no solo es esa mujer –las lágrimas no demoran en llenar mis ojos –es todo maldición...es todo –Aurora toma mi mano y la acaricia buscando calmarme
-sabes que si se divorcian traerás más dolor del innecesario -
-pero al menos cuando muera él no estará tan ligado a mí como ahora –ahora no hay nadie que no sepa que no hay vuelta atrás en mi destino
-no voy a insistir más en esto y aunque se me parta el corazón Catalina pero no cuentes conmigo en esta misión suicida, mis padres no lo harán y Grego mucho menos. Crece y deja de correr cuando las cosas se complican, ese tonto que esta allá afuera te ama como un  loco, no le destruyas la vida ni a él ni a ti misma –Aurora se aleja de mi
-esa es tu última palabra –ella asiente y tiene los ojos llenos de lágrimas y no deja de acariciarse el vientre y me preocupa que con todo mi drama su bebe no este cómodo –bien tendré que seguir de aquí en adelante sola con todo esto –Aurora niega con la cabeza y sale decepcionada de la habitación

Debí imaginarme que Héctor utilizaría en su favor a Aurora, pero después de esto no creo que intente hablar conmigo...Trace me dio de alta con el sinnúmero de recomendaciones acerca de mantenerme controlada, nada de emociones fuertes...nada que me pueda alterar.

-Catalina necesitamos hablar –justo cuando salía de la habitación entra Héctor
-me voy a mi casa Héctor, anoche fui muy enfática con este asunto...no hay vuelta de hoja, por favor entiéndeme –
-y quien me entiende a mí, crees que todo gira en torno a ti...deja de ser tan terca, no ves que te necesito...acaso no entiendes que no podemos vivir sin el otro –
-y cuando me muera que vas a ser –no me gusta utilizar este tipo de armas contra él porque sé que lo destrozan
-quien ha hablado de lo que será de mi cuando no estés...acaso piensas que podría sobrevivir sin ti –
-Héctor no digas estupideces...por favor Trace me ha dicho que no me altere y esto es todo lo que tengo que evitar, por favor voy a estar bien en mi casa –
-claro que estarás bien pero en nuestra casa, donde te pueda cuidar y pueda estar al pendiente de ti...maldición Catalina eres mi esposa y tengo que velar por tu bienestar –
-no insistas Héctor, me voy y piensa en lo del divorcio porque así no tendrías ninguna obligación hacia mí –respira profundamente y sé que mis palabras lo están lastimando más de lo que puedo imaginar, saca su teléfono y no sé a quién pueda estar llamando
-si...a nombre de Héctor Mafort....no importa el precio...perfecto estaremos ahí para la instalación de todo –de que estará hablando
-bien quieres ir a quedarte en la casa de tus padres, bueno lo harás bajo mis condiciones –ahora que se le habrá ocurrido a este loco
-a que te refieres Héctor –su expresión es de enojo
-ya lo averiguaras, sube al auto mientras arreglo unas cosas con Trace –intento protestas pero se va inmediatamente

Cuando llegamos a casas de mis padres están descargando un juego de alcobas nuevo, no hablamos nada durante el trayecto quiero ver que se trae entre manos
-como no quieres estar junto a mí y a mí me vale mierda lo que digas acerca de mi compromiso hacia ti porque no lo hago porque seas mi esposa sino porque te amo –no digo nada, esta tan enojado que haría explotar una bomba con solo chasquear la lengua
Entramos e inmediatamente entran a instalar el nuevo juego de alcobas en mi antigua habitación, sale al cobertizo a hablar por teléfono y sé que con quien habla es con Trace. Es un juego de alcoba maravilloso, cuando acaban de instalarlo llega una enfermera y ya veo por donde van las cosas
-Catalina ella es Denis, será quien te cuide todo el tiempo...enviare dentro de poco personal de servicio para que las atiendan...he sido claro y no me contradigas en lo que estoy diciendo Catalina porque mi paciencia con tus tozudeces se está agotando  -arregla me imagino que el pago con los trabajadores que estuvieron instalando el juego de alcoba

-mucho gusto señora mi nombre es Denis como lo menciono su esposo –es una señora de mediana edad, al menos se ve que es alguien agradable
-llámeme Catalina –le digo en respuesta

-cuando se te pase la rabieta sabrás donde encontrarme –
-y si no es ninguna rabieta Héctor, deja de tratarme como si fuera una niña –
-pues peor para ti, porque no te voy a dar ningún divorcio...no te voy a dar el gusto de que arruines nuestra relación –sale de la casa verdaderamente enojado

Me encierro en la habitación no quiero saber de nada ni de nadie. Al parecer Héctor cuadro todo a la perfección con Denis y no me ha importunado en nada.
Ibby fue enviada por Héctor para ayudarnos con el servicio, la alacena fue abastecida con lo necesario para mi dieta y para que ellas coman a su gusto. Hace dos días que no veo a Héctor y nada es lo mismo sin él, extraño su tacto, sus besos...las tonterías que saca para hacerme reír, pero será lo mejor para él, tiene que dejarme ir o cuando yo lo haga él no lo podrá soportar.

-señora no es que yo me quiera meter en sus asuntos pero alejar a su esposo de su lado no es lo más conveniente para usted, esta enfermedad es muy agresiva y los episodios depresivos son muy frecuentes. Su esposo se ve que la ama demasiado –son las palabras de Denis mientras me toma la presión
-Denis agradezco sus palabras pero créame es lo mejor que nos puede pasar a mi esposo y a mí –trato de pensar en cualquier cosa, suficiente tengo con acostarme todas las noches llorando porque lo extraño

Me dirijo a la habitación cuando siento que alguien llama a la puerta, solo le pido a Dios que no sea Héctor porque con lo sensible y vulnerable que me siento que si me llega pedir que vuelva a casa no dejaría que terminara...me iría con él a donde me lo pidiera, una lagrima escapa, mi corazón está que colapsa
-señora disculpe –me detengo, Ibby me llama –la señorita que siempre iba a trabajar con el señor en casa está aquí y pide hablar con usted –el tiempo se detiene...Vanessa está aquí
-di...dígale que me espere un momento en la sala –logro decir y voy al cuarto a maquillarme un poco no le voy a dar el gusto de verme hecha un desastre...pero como supo que estaba aquí...oh Héctor por qué ella

Luce tan segura de sí misma allí en mi sofá, en mi casa...puta perra, la odio como a esta maldita enfermedad que me aqueja no porque este enamorada de mi hombre sino por lo que ella significa para él, la odio porque ella se quedara con él y yo moriré

-que haces en mi casa –trata de responder pero levanto una mano indicándole que no he terminado –no tengo nada que hablar contigo, ahora saca tus pies de mi casa que no soporto respirar el mismo aire que respiras –ella evoca una sonrisa socarrona y la sangre me hierve
-pensé que si me hacia tu amiga iba a hacer esto más fácil para ti, pero eres tan malditamente inteligente que captaste mi juego que has logrado que Héctor se alejara tan solo un poco de mi pero no del todo porque para haberme descubierto eres tan estúpida –oh Dios ahora la sangre se me hela, que Héctor no haya cometido un tontera por mi culpa, él me dijo que me esperaría...
-y como se supone que lo harías más fácil para mí o mejor porque me convierto en la estúpida más grande que te quita la poca paz que puedas tener a pesar de mi presencia –
-sé que si Héctor me corrió fue por mi estúpida actitud ese día en la oficina –ahora soy yo la que sonríe
-no querida te corrió porque se lo pedí que es diferente porque créeme no hay nada que no le pida a mi hombre que no me dé –ahora se retuerce en su asiento, no esperaba que le dijera esto
-entonces por qué estás aquí...por qué Héctor se está refugiando en la bebida y por ende dándome ventajas sobre él nuevamente -¿ventajas? A que se refiere esta zorra
-la pregunta la hice al principio qué haces tú en mi casa, porque no entiendo como si mi esposo te corrió hace dos días –ahora veo como palidece –te recuerdo que yo se lo pedí –aunque no sabía si lo haría pero eso no se lo voy a decir a esta puta –sigues aun aquí en la ciudad –
-no necesito el puesto en la editorial Catalina, soy fotógrafa profesional puedo trabajar en cualquier lugar y no me voy a ir sabiendo que haces de la vida del hombre que amo una miseria –eso fue un golpe bajo de principio a fin...los ojos me arden pero no voy a llorar delante de esta maldita, primero muerta
-valla no solo eres la hermana de la mujer que le rompió el corazón a mi hombre –no me cansare de restregárselo porque ella tiene que entender que él es mío –sino que además practicas el mismo hobbie que mi esposo, interesante...pero aun no me has dicho que haces aquí –camino hacia la ventana, necesito respirar
-por lo visto no te preocupas de su debilidad por la  bebida –claro que si perra pero no te lo voy a decir porque lo último que quiero es que veas cuan menguada me ha dejado tu información –así que a eso es a lo que ha venido, para decirte que estás haciendo un buen trabajo a mi favor, sigue así...alejándote de él, que es ahí donde yo entro a jugar de fiel amiga y cuando tú no estés en la única mujer en la que se podrá refugiar será en mi –no vayas a llorar, no cometas una locura Catalina...respira, respira...maldición
-te estas escuchando –ahora la miro a los ojos –de que te sirve jugar a ser su mejor amiga si con quien a final del día soñara será conmigo, si estás aquí para decirme que te has acostado con mi marido, pierdes tu tiempo –por favor que no lo haya hecho Señor, por favor –querida tu siempre serás la chica de al lado...no aprendiste la lección cuando murió tu hermana, ya es hora de que la aprendas porque Héctor jamás se fijara en ti como una mujer para desear porque tú siempre serás su fiel amiga y los seres humanos cuando tenemos algo seguro preferimos morir antes que arriesgarlo, te incrustaste en la zona de amigos por mérito propio y para que salgas de ahí te tocaría nacer de nuevo, portarte como una perra con la situación de tu hermana y no haber permitido que él viniera tras mí –ahora son los ojos de ella los que se llena de lágrimas, puede ella amar a mi esposo tanto.
-te muestras muy segura de sus sentimientos –oh Señor si ella supiera la batalla que estoy manteniendo en mi interior para no derrumbarme
-dime si desde que regresaste a la vida de mi esposo él ha intentado algo contigo –guarda silencio –no lo pregunto porque dude de él, lo pregunto más para ti para que racionalices y te des cuenta que ni en sano juicio ni en el peor de los momentos Héctor te toma como una mujer –se levanta y tensa la mandíbula y se seca un par de lágrimas que se le escapan
-solo sé que morirás muy pronto maldita...te odio porque cuando creí que había logrado que Héctor me amara apareciste tu o bueno ese maldito investigador con toda tu vida en sus manos...ahora te regodeas porque Héctor es tuyo pero si te sirve de consuelo –se acerca a mí y no me muevo, empieza a hablar solo para que yo la escuche –me hice unos estudio de compatibilidad y soy inmunocompatible contigo –trago fuerte –sí querida, tu miserable vida depende de mí y como tal he decidido que tienes que morir así como tú me has matado tantas veces al haberme robado a Héctor –respiro fuerte
-sabes lo que has hecho, me has confesado lo suficiente para que Héctor te odie para siempre –ella sonríe
-no le dirás nada a Héctor porque aunque lo hicieras eso no cambia el hecho de que aunque Héctor se enterara nunca seria tu donante...primero muerta, me escuchas...primero muerta a devolverte la oportunidad de seguir al lado del hombre que amo –sale de la casa y me desplomo

Denis enseguida corre junto a mí y me levanta, empiezo a temblar y las lágrimas me acechan a raudales, el aire desaparece por completo. Todo se torna negro...

HÉCTOR

-vuelve a aparecer cuando la maldita borrachera haya desaparecido de tu sistema, porque te juro Héctor que en lo único en lo que puedo pensar es en matarte –quiero ver a Catalina, estoy aterrorizado...ha sufrido un pre infarto y por mucho que quiera discutir Gregory tiene la razón, así no la puedo ver
-solo me voy a bañar y regresare, tú no eres nadie para decirme si debo o no estar al lado de mi mujer –pero él no se inmuta, esta tan enfadado porque no estuve con Catalina...pero eso no es necesario...yo mismo tengo suficiente de mí.

El agua está lo suficientemente caliente que escuece mi piel, necesito una forma de recordarme que mi vida sin Catalina es una mierda...si no hubiese estado ebrio  quien estuviese estado a su lado seria yo.
Tomo una taza de café cargado...la dejo a la mitad y lo estrello contra la pared de la cocina...caigo sobre mis talones y golpeo una y otra vez el suelo hasta que mis nudillos sangran, lloro como nunca lo he hecho...si Catalina hubiese muerto allí no me hubiese perdonado no haber estado ahí...


-quiero ver a mi mujer Trace, soy su esposo maldita sea –Trace me bloque el acceso a la habitación de Catalina
-ella está en un estado de coma inducido Héctor, no puedes hacer nada al respecto por ahora, déjame llevarte hasta donde una enfermera para que te cure esos nudillos que están demasiado heridos –
-Pero no me voy a mover ni un momento de la cama de Catalina después que me deje atender...he sido claro –ella asiente y me guía hasta donde hay una enfermera

Han provocado un estado de coma en Catalina porque en el momento del pre infarto, la poca oxigenación que llegaba a su cerebro podría haber provocado una isquemia...solo están esperando que sus funciones vuelvan a la normalidad...eso fue hace una semana y han tenido que realizarle una trasfusión en el tiempo que lleva así.

Hable con Denis e Ibby para que me cuenten que sucedió pero solo me dan razón de que Vanessa estuvo hablando con ella antes de que sufriera el pre infarto...a penas me informaron lo sucedido no lo podía creer, no sé qué le habrá dicho a Catalina pero cuando la vi llegar a la clínica la corrí y le advertí que si volvía a verla a un radio de mil kilómetros de mi o de Catalina lo iba a lamentar.


CATALINA
-recuerdas tu nombre –la luz es incandescente y mi cerebro empieza a trabajar y sé por experiencia propia donde estoy
-sé quién soy Trace...que me sucedido esta vez –ella sonríe y no puedo evitar sonreír de vuelta
-debes cuidarte Catalina, has estado durante dos semanas en un coma inducido...sufriste un pre infarto, te tendremos en observación un par de días más y poder darte de alta –
-uff los infartos están contemplados también –la expresión de Trace cambian
-estas muy débil Catalina y tu estado emocional no ayuda...hazme el favor de arreglar tus diferencias con Héctor porque una cosa es que estés enferma y otra es que aceleres los resultados al alejarte de la persona que es tu bomba de oxígeno para vivir –las palabras de Trace me afectan más de lo que esperaba
Realiza un último chequeo y veo que Héctor se asoma por la puerta...tiene una barba muy mal cuidada, sus ojos parecen hinchados de sangre...luce fatal
-creí que yo era la que había sufrido un infarto –una esquina de su boca se levanta pero esa emoción no llega a sus ojos y por favor corazón si por cada muestra de dolor de mi hombre te vas a comportar así mejor lleguemos a una tregua
-de hecho sufriste un pre infarto –camina hasta mi cama no preferida
-estas bien –
-solo voy a estar bien hasta que tú lo estés mi amor –su voz es un susurro
-ven aquí cabezotas –me abraza o soy yo quien lo hace...eso no hace la diferencia –perdóname –le susurro y beso sus cabellos, lo siento llorar pero tengo que ser fuerte...fue mi culpa estar aquí...se lo debo
-shh...no hables pequeña, soy yo quien debe disculparse pero ahora no es el momento, sí?? -

-Héctor podemos hablar un momento por favor –Trace entra a la habitación
-claro dime –Héctor la mira pero esta junto a mí sosteniendo mi mano
-necesito que sea en mi consultorio, debo mostrarte unos documentos que debes firmar
-los puedo firmar después –Trace lo mira con urgencia
-Catalina no le pasara nada si me dedicas cinco minutos –
-anda mi amor...te prometo que no me moveré de aquí –le dedico una sonrisa y el niega con la cabeza y sale con Trace

HÉCTOR

-puedes colocarte en contacto con ella –aun no puedo creer lo que estoy escuchando –Héctor me estas escuchando –asiento
-pero como han podido averiguarlo –
-hace un mes ella se hizo un examen de incompatibilidad y resulto positivo pero asevero razones personales por eso no la considere, pero al enterarme por Denis que tú la conocías quizás puedas hacer algo –aun no salgo de mi estado de shock
-necesito que cuides de Catalina mientras me ausento de la ciudad, ella no está aquí, ya no trabaja en la editorial –Trace asiente
-no podemos perder tiempo Héctor lo sabes, verdad –
-claro que lo sé –


-ey has despertado dormilona –me regala una sonrisa y mi corazón cobra vida, como puedo necesitar tanto de Catalina para vivir –necesitamos hablar mi amor –
-lo mejor es que lo hablemos en casa amor...este no es el lugar más adecuado –tomo su mano y la beso
-no se trata de eso pequeña –tomo aire –necesito viajar –ella me mira desconcertada –no será por mucho tiempo, tomo un vuelo esta tarde y espero estar regresando mañana por la mañana –
-y que es tan importante que tengas que viajar –tú mi amor...tú, pero no puedo decírselo –hubo una complicación en una de las instalaciones de la editorial y requieren mi presencia –odio mentirle pero ella no debe saber lo que tengo en mente
-pero no es nada de qué preocuparse, verdad –me mira con sus hermosos ojos comprensivos
-no mi pequeña...solo es una tontería que requiere de mi presencia, debí de haber estado allí hace mucho pero lo estuve aplazando y ya no puedo seguir postergándolo –otra mentira más –mi amor quiero que sepas que te amo...te amo más que a mi vida –sus ojos se llenan de lágrimas y eso me parte el corazón, no quiero que llore por mi culpa...sean cuales sean las razones
-yo también te amo...ahora ve que no quiero pasar un momentos más lejos de ti –la beso profundamente...ojala que con un beso entendiera cuanto la amo, ojala ella entendiera que esta vida no la quiero sin ella


-qué haces aquí Héctor –Vanessa me mira sorprendida y no es para menos
-puedo pasar –ella asiente y me sigue hasta la sala
-ya sé que eres compatible con Catalina –Vanessa me mira y parece no importarle lo que le he dicho
-te lo contado tu amada esposa –no soy inmune a su sarcasmo, ahora puedo ver que ella nunca ha sido la amiga que fingió ser todo este tiempo
-no, no me lo dijo Catalina, me entere por la doctora que la atiende...estudie con ella, es mi AMIGA, va en contra de tu petición de no decir nada pero ahora lo sé. No me voy a andar con rodeos Vanessa, pídeme lo que quieras pero te suplico por favor que sirvas de donante para mi esposa –estoy suplicando de verdad...hare lo que esté a mi alcance, posible o imposible no lo sé, solo sé que no quiero ver morir a luz de mi vida
-tanto la amas Héctor Mafort Villianco –sus ojos se llenan de lágrimas y a diferencia de Catalina me da igual si Vanessa llora o no, no puedo soportar que me haya traicionado de la manera en que lo ha hecho
-pruébame Vanessa pero sea cual sea la petición que me hagas te la concederé si tan solo accedes a donar tu medula a mi esposa –es esto o que Catalina muera y no estoy dispuesto a ver como se le escapa la vida
-divórciate de ella y cásate conmigo y viajo en estos momentos contigo y le donare mi medula a Catalina –
-sabía que me pedirías eso –el corazón me late tortuosamente, puedo vivir lejos de Catalina pero no puedo vivir sabiendo que ha muerto...no podría vivir así –así que si esa es tu petición te será concedida –veo un brillo malévolo en sus ojos, como pude alguna vez considerarla como mi amiga...ella tiene el alma tan podrida como la tenía Anna...incluso más
-no, tengo una condición más –que más me puede pedir
-que solo donare mi medula después que nos hayamos casado –frunzo el ceño
-pero que estás diciendo, acaso no crees en mi palabra...Catalina necesita con urgencia ese trasplante –ella se me acerca y habla a mi oído, tan solo sentir su perfume me repugna
-es eso o que ella muera...lo tomas o lo dejas –
-como tú digas –ella sonríe como si hubiese ganado el premio gordo de la lotería
-una última cosa antes de que empiece a  hacer mis maletas –ahora está frente a mí y sé que quiere que la bese
-no Vanessa...me tendrás cuando me divorcie de mi esposa, antes no tendrás nada de mi...ahora por favor toma tus cosas, necesito ponerme en contacto con mis abogados –
-entonces más te vale que ese divorcio salga antes de que amanezca –sale enfurecida hacia su habitación

Hago una serie de llamadas a mi abogados, han prometido que tendrán el documento redactado para mañana en la tarde. Lo difícil está por venir, como se lo diré a Catalina...la conozco y sé que me dirá que prefiere morir antes que verme casado con Vanessa pero yo no podría vivir sin ella...no podría
-aun tienes la oportunidad de arrepentirte Héctor –me reta con suficiencia
-me quieres o no –le digo sin mostrar emoción alguna, ella me sonríe con desdén –pues bien, tomemos ese vuelo


Dejo a Vanessa en su hotel y conduzco hasta la casa de Gregory...le dije a Catalina que llegaría mañana pero negociar con la paria de Vanessa no llevo tanto tiempo
-que esa perra te ha pedido que –Gregory grita tan fuerte que todos en su casa sabrán que es lo que pasa
-no tengo otra opción maldición,  puedes recomponerte...tú y yo estamos tan jodidos en esto que de todas las cosas en ti es el único en quien puedo confiar de verdad –
-estás loco Héctor, Catalina jamás te dará el divorcio bajo esas circunstancias...jamás –
-y quien ha dicho que tiene que saber los verdaderos motivos –ahora me mira sorprendido
-has enloquecido de verdad...la vas a destrozar y eso es lo que realmente quiere esa maldita –
-crees que no lo he pensado...pero diablos si tu estuvieras en mi lugar que escogerías –ahora agacha la cabeza
-que tengo que hacer –
-solo estar para ella –la voz se me corta en este punto
-vete antes que me arrepienta –
Conduzco hasta la casa pero no entro sino que sigo hasta el jardín...hasta nuestro jardín, allí me tumbo sobre la grama y miro hacia el cielo
Dios ayúdame en todo esto...

Los rayos de sol se asoman entre los árboles y me despiertan...me quede dormido a la intemperie, mis huesos están entumecidos, hoy tendré que mentirle nuevamente a la mujer que amo...hoy morirá una parte de mi

Llegamos a casa, Trace considero que ya estaba en condiciones de volver a casa. Gregory se ha encargado que todos sepan de la situación, nadie dirá nada...Aurora no lo sabe, ya está en su sexto  mes de gestación y esto la golpearía fuerte y no queremos que ella o su bebe se vean afectados.

-Catalina podemos hablar –ella está sentada en la cama, cruza sus piernas y palmea el lugar junto a ella invitándome
-que sucede mi amor, te noto extraño –oh Señor esto será más cruel de lo que planee
-sabes que te amo verdad –
-vamos Héctor lo que tengas que decir solo dilo y ya...nunca podría dudar de tu amor, sé que cuando me enojo digo tonterías y hago estupideces pero siempre he estado segura de tu amor –
-oh Dios Catalina no te merezco –la voz se me quiebra pero me aclaro la garganta –yo no puedo vivir si tú mueres, cuando te fuiste de mi lado...cuando me informaron de tu ataque al corazón comprendí que sin ti mi vida no tiene sentido –
-Héctor... –coloco mis dedos sobre sus labios
-por favor déjame continuar –ella toma mi mano y la besa...no puedo con esto, como puedo creer que si la destrozo yo podría salir ileso –he perdido mucho en mi vida Catalina, mucho...y perderte a ti no se compara con nada, si te pierdo sería capaz de cometer cualquier locura con tal de seguirte a donde sea que lleve la muerte –Catalina empieza a llorar y le limpio sus  lágrimas, pero no puedo flaquear ahora no –por eso Catalina lo mejor será que yo me valla lejos de ti...lejos donde no sienta tu presencia, donde no respire tu olor... –
Catalina me abraza...la estrecho entre mis brazos y lloramos juntos, empiezo a besarla con desesperación porque sé que esta será la última vez que lo haga...

CATALINA
Soy un desastre total...ahora lo he perdido todo y es así porque he perdido al hombre que amo para siempre, no puedo pedirle que no me deje porque yo sé que es lo mejor para él...no quiero destruirle la vida...solamente no puedo...
Beso su frente y cierra sus ojos, le empiezo a quitar la camisa y él se deshace de mi vestido, levanta un poco sus caderas mientras le quito el pantalón. Me siento a horcajadas sobre él
-cómo quieres que te haga el amor –sostengo su rostro entre mis manos y lo único que puedo ver es lo mucho que sufre
-lento mi amor...despacio –
Mi lengua recorre sus hermosos labios y el los abre para mi
-te amo Héctor Villianco...nunca lo olvides –
Mi lengua recorre su boca, mis labios presionan fuerte contra los de él...quiero que me sienta por última vez para siempre, gruñe contra mis labios y muerdo su labio inferior tan fuerte que lo lastimo pero no me importa esta será la última vez que sienta a mi esposo y no me importa.
Soy dueña de su cuerpo, soy la dueña de su alma...soy la dueña de su amor...
Muerdo su cuello y sujeta fuertemente mis caderas
-deja entrar en ti mi amor –
-todo a su tiempo amor...todo a su tiempo –
Recorro cada centímetro de su cuerpo, dejando un mordisco aquí y allá...su cuerpo se estremece, quiero dejarlo marcado...quiero que siempre recuerde que él es mío y yo soy suya. Se deshace de su bóxer y ahí está en toda su gloria su hermosa erección, solo para mí. Entra en mí despacio, con cuidado...reconociendo cada centímetro de mi interior, me muevo lentamente, me aferro a sus hombros
-Catalina... –
Siento como crece en mí, y mi cuerpo arde por él...sujeta mis caderas y me tumba sobre mi espalda
-has hecho trampa –le digo un poco ronca
-es mi turno –
Nuestros cuerpo colisionan uno contra el otro, sus labios no abandonan mi boca mientras se mueve con elegancia sobre mí, mis manos llegan hasta su trasero y clavo mis uñas en ellos, quiero que entre más en mi...quiero que me duela, quiero que mi cuerpo este adolorido, quiero que mi cuerpo siempre lo recuerda
-cómo voy a poder vivir sin ti –dice entre jadeos pero yo no sé qué contestar...al menos yo lo podré hacer por un corto tiempo
Sus movimientos se aceleran –dámelo Catalina, córrete para mí –suplica y como si mi cuerpo fuera una orquesta y el supiera manejar todos los acordes me corro para él, grito su nombre como si de mí ser brotara un volcán en erupción...él me sigue y se corre dentro de mí, me llena de su esencia.


Recorro el espacio junto a mí pero Héctor no está conmigo...abro mis ojos y no está...me levanto y reviso el baño y tampoco está allí, busco en el closet y toda su ropa ha desaparecido, veo la camisa   que utilizo para nuestra boda y me la coloco, remango sus mangas y me encojo como en un ovillo y empiezo a llorar...llorar es lo único que me queda.
Pero me detengo a observa el nochero y veo que su reloj está ahí y plisa una nota

Buenos días mi amor, hubiese querido permanecer junto a ti cuando despertaras...pero si lo hacía no iba a ser capaz de irme de tu lado, te amo Catalina...te amo y quiero que nunca lo olvides...te preguntaras por qué deje mi reloj pero quiero que lo conserves para que recuerdes que no importa el tiempo que pase alejado de ti NUNCA, NUNCA  DEJARE DE AMARTE...por favor nunca olvides los votos que te hice el día de nuestra boda porque como sello de reyes así te llevo grabada en mi alma
Por siempre tuyo
Abrace la nota contra mi pecho y llore otro tanto...me levante y baje a desayunar, no puedo solamente dejarme morir, se lo debo a él...se lo debo a nuestro amor...


En las horas de la tarde Greg ha venido a visitarme, con la excusa de saber cómo sigo...Aurora no hacía mucho se acababa de ir y sus padres prometieron que cenarían conmigo, aun no les he contado que Héctor se ha marchado...solo necesito asimilarlo, solo eso.

-señora el abogado del señor Héctor la busca –cuando escucho esto mi cuerpo se tensa, Greg me agarra fuertemente la mano y se lo agradezco

Como lo temía...así sucedió, Héctor ha preparado nuestro divorcio. Quiero solamente morirme, quiero solamente huir...quiero solamente no sentir todo este dolor que siento. Greg no se ha marchado de mi lado y si no me derrumbo es gracias a él
-mañana se habrá acabado todo –le digo entre lágrimas a Greg
-eso crees Catalina...darán por terminado su matrimonio no su amor. Si de algo estoy seguro es que ese imbécil te ama, y te ama demasiado y si te lo digo yo eso debe decir mucho –me abraza y lloro...lloro hasta que me quedo dormida


Hace un mes hubiese creído que no iba a sobrevivir a mi divorcio con Héctor...solamente firme los papeles que su abogado muy comedidamente llevo a nuestra casa, la última vez que vi a Héctor fue la anoche en que hicimos el amor...he estado muy deprimida pero sigo con vida, me alimento por inercia, mis controles siguen...por decisión de él me he quedado con nuestra casa o mejor dicho él ha querido que conserve nuestro jardín. Por mucho que lo discutí no pude librarme de una pensión que dejo para mí. Denis sigue acompañándome en casa, me ha servido de mucho apoyo, es una mujer muy sabia.

Estoy en la clínica, me he sentido demasiado débil. Denis me ha obligado a venir y menos mal que lo hice porque mientras Trace me examinaba me desmaye...ya estoy consciente y solo estoy esperando que lleguen los resultados de los laboratorios para saber cómo actuar...a veces me pregunto cuanto hubiese cambiando mi vida si Vanessa no hubiese sido como es, no me atrevo a cuestionarla...su obligación no era salvar mi vida, prefiero creer que este es mi destino con donante o sin el...

-Catalina te siente bien –
-de por Dios Trace define la palabra bien porque eso en mi es tan relativo no crees –Toma asiento junto a mí –mujer estas preocupando que me sucede ahora –
Respira profundamente –Catalina no sé cómo vallas a tomar esto –toma mi mano y ahora sí que me preocupa –Catalina...estas embarazada –
-que has dicho Trace –será que sigo desmayada o estoy desvariando
-Catalina vas a ser madre –
-oh por Dios –llevo mis manos a mi vientre –es eso posible pero si mientras estuve con Héctor siempre me cuide –mi voz apenas es audible
-te has sometido a muchos tratamientos farmacológicos y seguramente esos medicamentos disminuyeron la acción de los anticonceptivos, eso puede pasar Catalina –
-Trace pero mi bebe...Trace me voy a morir –
-Catalina, eres una mujer fuerte...si te sigues cuidando como hasta ahora podrías tener un embarazo a término –
-necesito... –no puedo seguir me descompongo en llantos, Trace aprieta mi mano pero no dice nada más
Dios necesito a Héctor junto a mí...puedo vivir lejos de él sabiendo que es lo mejor para él pero no puedo lidiar con esto...oh Dios un bebe de Héctor y mío, él lo tiene que saber.
-Trace nunca lo pregunte porque siempre lo he sospechado pero Héctor se mantiene en contacto contigo –ella enmudece y sé que es así –podrías por favor no decirle sobre esto –
-Catalina pero... –
-Trace esto es una noticia que tengo que dársela yo misma...por favor prométemelo –ella asiente

Llego a casa...con un mundo de incertidumbres, Trace me ha dado su palabra y tengo que confiar en ella. No puedo decirle a nadie que estoy embarazada hasta que hable con Héctor...Dios y que si no sobrevivo, que si no soy capaz de darle vida a mi bebe...lloro de solo pensar que mi bebito sufra por mi culpa, voy a ser madre, una madre que nunca vera crecer a su pequeño o a su pequeña...

Han pasado dos días desde que estuve en el consultorio de Trace...ahora parezco una maniaca del control...Trace me receto pastillas acorde a mi tratamiento y a mi estado, he estado comiendo puntualmente, he dormido aun en contra del insomnio...tengo que hacerlo ahora por mi bebe

-señora han traído un sobre para usted –
Abro el sobre y este contiene una tarjeta de invitación...por su diseño puedo ver que es una tarjeta de boda. La reviso para ver quién pudo haber enviado esta invitación. Seguramente algún directivo de la editorial que ignora que Héctor y yo ya no estamos casado.
Leo la tarjeta...

NOTA: el viernes 7 de junio llegaremos al final de nuestra historia...besos de colores gente hermosa.









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